De Rosa defiende que el modelo Alzira contribuye a mantener el sistema

«Las cosas no son blancas o negras, lo malo de la ideologización es que se basa en prejuicios»

Ante los grandes retos que tiene la sanidad, como son el envejecimiento de la población, la aparición de nuevos medicamentos y la cronicidad de las enfermedades, «desde la colaboración público privada se puede contribuir a generar valor para mantener el modelo de bienestar en el largo plazo, haciéndolo sostenible».

Así lo manifestó ayer el consejero delegado de Ribera Salud, Alberto de Rosa, en una conferencia en la Universidad Católica de Valencia (UCV) en la que expuso las claves del modelo de gestión sanitaria de este grupo empresarial que está siendo analizado en la Universidad de Harvard como «Business case study».

A su juicio, «tener un gran sistema sanitario consigue que la gente viva muchos más años y que aparezcan nuevos medicamentos, pero esto genera también una presión en los costes del sistema en general y del sistema de sanidad en particular».

Por ello, ante los retos de la sanidad «es fundamental mantener los valores de nuestro sistema, como son la equidad, la solidaridad y la universalidad, e intentar ver cómo se puede gestionar cada vez mejor».

«Más calidad a menor coste»

En este sentido, considera que el modelo de Ribera Salud «aporta innovación, flexibilidad y un nuevo modo de hacer las cosas». Al respecto, recordó que según la Sindicatura de Cuentas, este modelo supone un 30 por ciento menos de coste que el Gobierno valenciano no tiene que pagar en sus propios hospitales. De hecho, este organismo ha señalado que ese treinta por ciento representa un ahorro por hospital de 45 millones de euros al año, aporta que las listas de espera sean mucho más bajas -38 días de media frente a 120 de la administración pública- y supone que la calidad asistencial sea más alta. «Estamos ofreciendo más calidad a menor coste».

Añadió que «ante los retos a los que se enfrenta la sociedad no hay respuestas fáciles, las cosas no son blancas o negras, lo malo de la ideologización es que se basa en prejuicios».