Comunitat Valenciana

La obra ¡Triste herencia! de Joaquín Sorolla se expone por primera vez en Irlanda

La muestra, que se podrá visitar hasta el 3 de noviembre, está integrada por 52 obras

El presidente de la Fundación Bancaja, Rafael Alcón, y la gerente Irene Guasque.
El presidente de la Fundación Bancaja, Rafael Alcón, y la gerente Irene Guasque.larazon

La muestra, que se podrá visitar hasta el 3 de noviembre, está integrada por 52 obras

La exposición “Sorolla: Spanish Master of Light” abrirá mañana sábado sus puertas al público en la National Gallery de Irlanda tras su inauguración esta tarde en un acto al que asisten el presidente de la Fundación Bancaja, Rafael Alcón, y la gerente Irene Guasque, en representación de la institución que ha cedido la obra ¡Triste herencia! perteneciente a la colección de arte de la Fundación.

La exposición, que se podrá visitar hasta el 3 de noviembre, está integrada por 52 obras de Joaquín Sorolla. Esta es la primera exposición de la obra de Sorolla en Irlanda, organizada con la National Gallery de Londres, en colaboración con el Museo Sorolla de Madrid. La exposición se presentó por primera vez en la National Gallery de Londres, donde se clausuró el pasado mes de julio. La exposición de Dublín incluye 14 obras que no se exhibieron en Londres.

La exposición muestra una selección de sus obras maestras tempranas de temática social, entre las que se encuentra ¡Triste herencia!, única obra del artista valenciano que ha viajado desde la ciudad de Valencia a esta exposición. La muestra incluye también retratos y escenas de género de la vida española, así como los paisajes, las vistas de los jardines y las escenas de playa por las que Sorolla es internacionalmente conocido.

Pintada por el artista en la playa de la Malvarrosa hace 120 años, en 1899, el artista incluyó la obra ¡Triste herencia! en la cuidada selección de trabajos que envió a la Exposición Universal de París de 1900, donde causó una gran sensación, tanto entre el público como entre la crítica. El jurado le concedió por mayoría el Grand Prix por la totalidad de su obra, pero en especial por ¡Triste herencia! La pieza permaneció en la Iglesia de la Ascensión de la Quinta Avenida de Nueva York durante más de cincuenta años hasta que fue adquirida por Fundación Bancaja en 1981, recuperándola así para el patrimonio cultural valenciano.