La última mascletà sortea la lluvia y envuelve Valencia de estruendo y color

La última mascletà de las Fallas de 2015 ha sorteado las intermitentes lluvias que descargaban desde primeras horas en Valencia para provocar un éxtasis colectivo en una plaza abarrotada que ha premiado la mezcla de estruendo, potencia y color ofrecida por la empresa Pirotecnia Valenciana.

La pirotecnia de Llanera de Ranes ha consagrado, un año más, la plaza del Ayuntamiento de Valencia como la catedral del ruido y del sonido en un espectáculo de especial potencia que puntualmente se ha disparado a las 14 horas, a pesar de la amenaza de lluvia y viento.

El gerente de la empresa, José Manuel Crespo, ha reconocido los nervios vividos, pero ha incidido en que todo ha salido "perfecto"e incluso "mejor de lo esperado"debido a las complicaciones derivadas de la lluvia.

Ha explicado que en su espectáculo se han quemado 270 kilos de material reglamentado porque "no se merecía menos el día que es", con un inicio tradicional de traca seguido de tres fases aéreas "clásicas", más una secuencia digitalizada por toda la plaza con efectos acústicos novedosos nunca lanzados, conocidos como 'godzilas'.

A continuación ha llegado el turno de las cinco retenciones terrestres con acompañamiento aéreo "de mayor a menor como marca la tradición pura valenciana", seguida de un gran terremoto y un bombardeo larguísimo y fuerte y con mucho color "como gusta a los valencianos".

Esta parte final ha quemado en apenas 25 segundos entre 1.300 y 1.400 volcanes, truenos de aviso, chicharras y carcasas aéreas con un resultado "potentísimo"aunque, según Crespo, lo que más mérito ha tenido ha sido el terremoto debido a "lo que se había mojado".

Con el 100 por 100 del material fabricado por su empresa, Crespo ha asegurado que su objetivo era hacer "la mejor mascletà de todas"y que esta, por ser su estreno en un día 19 de marzo, ha sido, junto a la que lanzó en la misma plaza con 17 años (1992) y la de la primera visita de los Reyes a una mascletà en el 96, las que más le han marcado.

En su balance de las fiestas, la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, ha pedido "no quedarse con la sensación del mal tiempo"sino en lo que se ha "disfrutado"durante los 19 días de marzo y ha asegurado que han sido "unas Fallas muy buenas".

Ha alabado la "calidad espectacular"de los monumentos y ha defendido el acierto de la falla municipal porque no ha recibido "un solo comentario adverso"y ha sido "una maravilla, una atracción tremenda para visitante por la muestra del enorme arte que encierra del gremio de artistas falleros y de la tradición valenciana".

Respecto a las mascletaes, ha asegurado que los pirotécnicos foráneos de los primeros días dispararon con una "dignidad tremenda"y conforme pasaban los días "ha ido in crescendo y hemos oído auténticas obras de arte también en la pirotecnia".

Barberá, que ha deseado que la Cremà discurra "fenomenal"y ha optado por poner "al mal tiempo buena cara", ha sido preguntada por la posibilidad de trasladar la cremà a los lunes y, aunque ha dicho que hay que seguir la "voluntad de los artífices de la fiesta, los falleros", ha opinado que "hay que mantener la tradición".

Ha argumentado que este año que San José ha caído en el centro de la semana, ha demostrado que los sectores vinculados al turismo tendrán un doble fin de semana de beneficio, el pasado y el que viene con el puente.

Junto a Barberá han disfrutado de la mascletà en el balcón consistorial el president de la Generalitat, Alberto Fabra, el delegado del Gobierno, Serafín Castellano, y los consellers Máximo Buch, María José Català y Manuel Llombart.

También han asistido el presidente de Adif, Gonzalo Ferré, los embajadores de Egipto, India, Polonia, Rusia y Turquía y los delegados del Gobierno de Asturias, País Vasco, Melilla, Baleares y Cataluña, así como el director general de la Casa de Asia, Ramón María Moreno, y los periodistas Nieves Herrero, Ramón Cendoya, Federico Quevedo y Antonio Pérez Henares.

Además han estado presentes los padres de la fallera mayor de Valencia, Estefanía López, Agustín y Chelo, quien ha asegurado que han sido "muy felices", que su hija ha sido "una gran fallera mayor y ha dejado el pabellón muy alto"y que están "superorgullosos"de ella.

Cruz Roja ha informado de que durante el disparo de hoy ha atendido a un total de 21 personas, diez de ellas por lipotimia y una ha tenido que ser evacuada.