Los valencianos superarán en 2018 el nivel de renta previo a la crisis

El informe del BBVA sobre la Comunitat apunta a que este año y el que viene seguirá el crecimiento del PIB y del empleo, aunque de una forma más moderada que en 2016

La renta de los valencianos se situará el año que viene un uno por ciento por encima del nivel previo a la crisis. Concretamente, el PIB per cápita estará por encima del 102 por ciento, dos puntos por encima del existente en 2007. Así lo aseguró ayer el responsable de Análisis Macroeconómico de BBVA Research, Rafael Doménech, durante la presentación del informe que de manera anual realiza esta entidad sobre las perspectivas para la región.

Según este documento, la Comunitat Valenciana continuará este año con su crecimiento económico (2,7 por ciento), aunque por debajo del que se produjo el año pasado, que se situó en el 3,5 por ciento. Para el año que viene se prevé un aumento del PIB del 2,6 por ciento. Esta mejora de la economía se verá acrecentada por la generación de empleo, que llegará este ejercicio a los 120.000 puestos de trabajo, tal y como apuntó Doménech.

Con estas cifras, se espera que la tasa de desempleo haya disminuido un 15,5 por ciento a finales del año que viene.

Pero no todo son buenas noticias. Doménech aseguró que el crecimiento de la Comunitat se produce a pesar de la bajada en el gasto público de la Generalitat, que sigue realizando ajustes para acercarse al objetivo de déficit. Aunque este año se seguirán produciendo recortes, dijo, es muy poco probable que la región cumpla con el límite del déficit establecido para este año en el 0,6 por ciento.

El experto, que estuvo acompañado por el director de la territorial Este de BBVA, Alberto Charro, apuntó además que existen factores de incertidumbre para la región como los efectos del «Brexit», que ya se hicieron notar durante la segunda parte del año pasado. El precio del petróleo y la política fiscal, así como las condiciones de financiación en el sector privado y público y la incertidumbre de la política económica española son otros efectos que explican la desaceleración prevista para estos dos años.