Comunitat Valenciana

Redobles y silencio en la Semana Santa Marinera

El Marítimo vive sus días más grandes con emotivos actos para conmemorar la Pasión y Muerte de Cristo. Está previsto que miles de fieles se congreguen en las calles y parroquias valencianas

Las calles del distrito Marítimo de Valencia se llenan de recogimiento y devoción con las procesiones de la Semana Santa Marinera
Las calles del distrito Marítimo de Valencia se llenan de recogimiento y devoción con las procesiones de la Semana Santa Marineralarazon

El Marítimo vive sus días más grandes con emotivos actos para conmemorar la Pasión y Muerte de Cristo. Está previsto que miles de fieles se congreguen en las calles y parroquias valencianas

La Semana Santa es ya la dueña de las calles de cientos de localidades del panorama valenciano. Es, no obstante, en los barrios marítimos del Cabanyal, Grau y Canyamelar de Valencia donde más profunda e intensamente resuena el fervor. La Semana Santa Marinera, fiesta declarada de Interés Turístico Nacional, y Medalla de Oro de la ciudad de Valencia, atrae y congrega a miles de fieles llegados de todos los puntos de la Comunitat Valenciana.

Solo el redoble de los tambores, el paso a ritmo pesado y el murmullo entre costaleros hicieron frente al silencio sepulcral, riguroso y ferviente que emanó la solemnidad del Jueves Santo. A las 20 horas, como es habitual, se celebró el acto de la Profecía en la parroquia de Santa María del Mar, en la que participaron todas las hermandades marítimas. Posteriormente, se llevó a cabo el primer Acto Colectivo de la Semana Santa Marinera: la Visita a los Santos Monumentos. Las cofradías, encabezadas por sus Hermanos Mayores, recorrieron los cuatro templos de la zona, puntos fundamentales de la celebración religiosa del Marítimo: Santa María del Mar, Nuestra Señora del Rosario, Cristo Redentor – San Rafael Arcángel y Nuestra Señora de los Ángeles.

Entrada ya la noche, se llevó a cabo el Encuentro de la Virgen. Este es, como marca la tradición, uno de los momentos más dolorosos de la Semana Santa. El Santísimo Cristo de los Afligidos, portado a hombros por los cofrades hasta la Virgen, es el primero en recorrer las calles del Marítimo. Le siguió la imponente Procesión del Silencio, en la que los miembros de la Pontificia y Real Hermandad del Santísimo Cristo de la Concordia portaron báculos luminosos como única referencia de vida y esperanza durante el agónico camino de la Pasión hacia el desventurado final, cada vez más próximo.

Minutos antes de la medianoche, y mientras en varias parroquias se velaba en horas santas, arrancaba la Procesión de las Antorchas en Nuestra Señora del Rosario. La cera de las velas bañó las calles del Canyamelar, y el reflejo de la llama, viva pero dolorosa, impregnó la cara del Nazareno.

A las 12 de la noche comenzó la Procesión del Silencio, que emanó aroma a incienso y llenó de devoción el recorrido del desfiles hasta bien entrada la madrugada. A la misma hora iniciaba el Vía Crucis de la Juventud en la parroquia del Cristo Redentor – San Rafael Arcángel. De esta forma se confeccionó la noche más larga de la Semana Santa Marinera, que con aguardo, recogimiento y dolor abrió la puerta al día grande de la fiesta religiosa.

El Viernes Santo arranca con los primeros rayos de luz solar, y, pese a que la noche ha sido larga, los Cristos del Salvador y del Amparo se encuentran temprano. Después, se celebra la ya tradicional y clásica ofrenda y visita a la orilla de la playa. Se trata de un rito que cada año gana más adeptos, dada la belleza del escenario. En esta edición, se rendirá homenaje a los marineros y trabajadores del mar fallecidos por la bravura de las olas. La mañana, además, está marcada por los largos vía crucis simultáneos que vuelven a plasmar la emoción ante la muerte de Cristo. Las plegarias, oraciones y recuerdos se agolpan en cada rincón del Marítimo, que está totalmente inmerso en la devoción.

A la tarde, es turno del gran acto de la Semana Santa Marinera. Se trata de la Procesión del Santo Entierro, desfile colectivo y general de larga distancia y en el que es apreciable el gran potencial de la fiesta religiosa en la Comunitat Valenciana. Las andas, las imágenes, los estandartes, la indumentaria y la música, de excelente calidad, convierten el momento en puro sentimiento, que sobrecoge y hace aflorar lágrimas y genuflexiones a su paso. La muerte está presente y la incertidumbre es palpable, pero no se pierde la fe. Casi 5.000 personas participan activamente en el más solemne instante de las celebraciones previas al Domingo de Resurrección, y está previsto que decenas de miles de fieles, turistas y curiosos se acerquen a las concurridas calles y desbordadas iglesias que conforman el mapa de la Semana Santa Marinera.

Vídeos para promocionar la Semana Santa

Una de las principales novedades que presenta la Semana Santa Marinera es la campaña promocional que el Ayuntamiento de Valencia ha diseñado con vídeos con el objetivo de «diversificar el turismo y para revitalizar los barrios del litoral valenciano», tal y como señaló el concejal de Cultura Festiva, Pere Fuset, y la concejala de Desarrollo Económico Sostenible, Sandra Gómez.