Todo un paripé

La política de Marzà busca tener cómplices como el STEPV para lograr su objetivo final

¿A quienes pretenden engañar el conseller de Educación, Vicent Marzà, y el Sindicato de Trabajadores de la Enseñanza del País Valenciano (STEPV) con su táctica de que esta última organización lance una crítica pública, en plan fariseo, contra quien militó y quizá milite todavía en sus filas?.

Me refiero al comunicado de ayer por parte del Sindicato en el que condenaba la política del conseller. No sumándose a la protesta mayoritaria de los valencianos contra la eliminación de los colegios concertados, sino recriminándole que recorta poco, que debería ir aún más allá y suprimir todo lo que no sea público, de forma que el control de la educación sea total.

La fórmula es muy conocida especialmente en la izquierda. Absorber a cómplices a favor de la política, en este caso esencial para el objetivo final copiado de Cataluña, de tal forma que no solo sostenga las tesis de Marzà sino que le anime a profundizar en esa vía sin importar que perjudique la evolución social hacia el desarrollo social, económico, cultural y también político.

La política de Marzà busca tener cómplices como el STEPV para lograr su objetivo final

Sucede que el STEPV ya no engaña a nadie en nuestra Comunidad. Es de sobra conocida su tendencia de izquierda radical, de inmersión lingüística y tendencia hacia nuestros vecinos del norte. Más ahora que disfrutan y demuestran sus simpatías sin disimulo.

He de reconocer la virtud de la escenificación de ayer, intentando trilear y expresar su oposición a Marzà. Todo un paripé, con el que muchos, quizá la mayoría, no tragamos. Así es la vida.