Casa Real

Una de las banderas más antiguas de España por fin se "inclina"ante su Rey, Felipe VI

Con los títulos de Real y Gloriosa, la Enseña de 'El Oriol' de Orihuela, un antiguo estandarte del siglo XVI, tiene el privilegio de solo inclinarse ante el Rey o ante Dios

la Gloriosa Enseña de 'El Oriol' de Orihuela (Alicante) se inclina ante los Reyes/@CasaReal
la Gloriosa Enseña de 'El Oriol' de Orihuela (Alicante) se inclina ante los Reyes/@CasaReallarazon

Una de las banderas más antiguas de España, la Gloriosa Enseña de 'El Oriol' de Orihuela (Alicante), ha cumplido hoy por fin el privilegio de "inclinarse"ante su rey, Felipe VI

Una de las banderas más antiguas de España, la Gloriosa Enseña de 'El Oriol' de Orihuela (Alicante), ha cumplido hoy por fin el privilegio de "inclinarse"ante su rey, Felipe VI, en su visita a la ciudad para arropar a los damnificados por la reciente gota fría.

Con los títulos de Real y Gloriosa, este antiguo estandarte data del siglo XVI y tiene el privilegio de solo inclinarse ante el Rey o ante Dios, algo que ocurre en este último caso cada 17 de julio para celebrar la Reconquista (en 1243) durante una misa en la iglesia oriolana de Santa Justa y Santa Rufina, patronas de la ciudad.

No había constancia histórica de que nunca antes de hoy perdiera su perpendicularidad ante un monarca aunque el cronista de la ciudad, Antonio Luis Galiano, ha relatado a Efe que Alfonso XIII visitó la ciudad en la década de 1920 por la inauguración de los riegos de la pedanía de La Murada y se sabe que la enseña fue sacada a la calle para recibirle.

El padre de este Rey, Alfonso XII, también había acudido a Orihuela en 1879 por 'las riadas de Santa Teresa' pero no consta que la bandera saliera de su vitrina en el ayuntamiento, como tampoco se sabe que ocurriera mucho antes en otra visita poco documentada de Carlos IV ni más recientemente cuando la reina Sofía presidió la rehabilitación del teatro Circo, en 1995.

Don Felipe y Doña Letizia han viajado hoy a Orihuela antes de ir también a Murcia para solidarizarse con los afectados por el reciente episodio de la DANA o gota fría, y el ayuntamiento oriolano ha aprovechado esta primera visita de los Reyes para sacar de su vitrina la enseña.

Al igual que ocurre cada 17 de julio, ha sido extraída con todo cuidado de su vitrina para descenderla verticalmente desde el balcón del ayuntamiento con el himno nacional hasta la plaza consistorial, donde ha tenido un lugar protagonista en la recepción a los Reyes y se ha "inclinado"frente a Felipe VI.

Orihuela cuida hasta tal punto el privilegio de que únicamente cede su posición vertical ante Dios o el Rey que cada vez que la desciende a la calle lo hace por el citado balcón sujeta por varias cintas de seda para que no pierda la perpendicularidad.

Y en la procesión de cada 17 de julio hasta la iglesia de Santa Justa y Rufina, es portada por una personalidad local especialmente elegida pero el mástil sigue siendo sujetado por representantes civiles y de las fuerzas seguridad por las mismas cintas, que aseguran en todo momento su posición vertical.

Para preservar esta pieza tan antigua, el ayuntamiento ha elaborado una réplica y los reyes han presidido hoy un simbólico traspaso de honores entre los dos paños para, a partir de ahora, usar la nueva bandera en algunos actos.

Este acto ha durado menos de un minuto y los Reyes lo han presenciado en primera persona antes del aplauso generalizado de los centenares de oriolanos que abarrotaban la plaza.

Testigos directos de este acontecimiento en la intrahistoria oriolana han sido su alcalde, Emilio Bascuñana, que ha explicado algunos detalles a los reyes, y las principales autoridades civiles y eclesiásticas del sur de la Comunitat Valenciana, como el president de la Generalitat, Ximo Puig, el obispo de la diócesis, Jesús Murgui, el ministro de Ciencia, Pedro Duque, y el presidente de la Diputación de Alicante, Carlos Mazón, entre otros muchos.

Por su "singularidad", la Gloriosa Enseña de 'El Oriol' fue declarada Bien de Interés Cultural (BIC) por la Generalitat en 2017 y aunque se tiene constancia de la existencia de una señera propia de la villa en 1357, el origen de este estandarte se sitúa en el acuerdo de la ciudad, en 1594, de realizar la bandera.

Lleva bordados del siglo XVI y está coronada por un pequeño oriol de plata, un pequeño pájaro de color amarillo que, según la tradición popular, "es el primero que hace el nido y el que vuela más alto", en palabras de Galiano, que además de cronista de Orihuela es presidente de la Real Asociación Española de los Cronistas Españoles.

Esta pequeña escultura del oriol era inicialmente dorada pero fue robada en su día por el marqués de los Vélez y desde su reposición en 1732 es una pieza en plata.

De 2,31 metros de largo por 1,3 de ancho, este paño de color carmesí lleva representados cuatro orioles, las barras de la Corona de Aragón por su antigua pertenencia a este reino y varios bordados borbónicos de la época de Fernando VI, hijo de Felipe V.

Efe