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La privatización de Aena «frena» el deseo de la Generalitat de gestionar El Prat
El anuncio hecho por el Gobierno de privatizar el 49% del gestor aeroportuario público Aena no ha gustado a la Generalitat, que nunca ha ocultado su deseo de controlar el aeropuerto barcelonés de El Prat.
Una de las más viejas aspiraciones del nacionalismo catalán, anterior incluso a su deriva secesionista y a la consulta, es el control de las principales infraestructuras públicas en Cataluña, y muy especialmente el aeropuerto de El Prat, el más importante de la región y el segundo de España.
De hecho, uno de los últimos consejos de ministros del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, el del 11 de noviembre de 2011, llegó a aprobar la creación de sendas sociedades que debían actuar como consejos rectores de los aeropuertos de Madrid-Barajas y Barcelona-El Prat. Aunque participadas al 100% por Aena, en estas sociedades estaba previsto que participasen los representantes de las instituciones catalanas y madrileñas, "lo que supondrá una mayor relación de ambos aeropuertos con las necesidades y aspiraciones de sus respectivos entornos".
Sin embargo, tras años de negociaciones entre las distintas administraciones, el pasado año Aena descartaba que ni la Generalitat, ni el Ayuntamiento de Barcelona ni la Cámara de Comercio catalana tuviesen ni voz ni voto en la gestión de El Prat.
Y si quedaba alguna duda de que esa situación se pudiese revertir, el anuncio ayer por parte del Gobierno de privatizar parcialmente el gestor aeroportuario español ha acabado de dar la puntilla a las pretensiones nacionalistas.
Por ello no se han hecho esperar las críticas de los partidos catalanes. Así, el conseller de Territorio de la Generalitat, Santi Vila, ha lamentado que la decisión del Gobierno de privatizar el 49% de Aena haya "desatendido"la vieja aspiración del gobierno catalán de gestionar el aeropuerto de El Prat, pues "siempre hemos considerado que el aeropuerto de Barcelona se debe gestionar desde Cataluña por intereses públicos y económicos de Cataluña".
Por su parte, el dirigente de UDC y conseller de Agricultura, Josep Maria Pelegrí, ha lamentado la privatización por frenar la aspiración de gestionar desde Cataluña la instalación de Barcelona-El Prat.
Según ha explicado en rueda de prensa en L'Hospitalet de Llobregat tras el Consell Nacional de UDC, el partido había pedido que el aeropuerto fuese gestionado desde los sectores públicos y privados de Cataluña "para dinamizar mucho más esta infraestructura". Ha deplorado que "la decisión lastra, una vez más,"esta posibilidad, y ha criticado que, en la apertura al capital privado, el Estado no ha tenido en cuenta las compañías catalanas especializadas en gestión aeroportuaria.
Ahora sólo falta esperar que la independentista Asamblea Nacional Catalana (ANC) no lleve a cabo la hora de ruta que presentó el pasado mes de marzo que preveía que «la visualización pública de que el país funciona por sí solo debe ser percibida por la ciudadanía y debe concretarse en elementos como el control de las grandes infraestructuras y fronteras –puertos, aeropuertos...–, la seguridad pública, las comunicaciones, etcétera»
Aena seguirá como ente público
La titular de Fomento, Ana Pastor, subrayaba ayer que AENA continuará siendo un ente público porque seguirá teniendo una mayoría de las acciones y del capital: el 51%. "El Gobierno va a mantener la mayoría del capital de AENA y el Estado seguirá siendo el poseedor de la mayoría en el Consejo de Administración de AENA Aeropuertos. El 49% del capital se estructurará entre un 28% que se colocará en Bolsa, a través de una OPV [Oferta Pública de Venta], y un 21% que se licitará para un núcleo estable de accionistas que serán seleccionados mediante un concurso público y con concurrencia", precisó.
La presencia de inversores privados, a juicio de la ministra, va a fortalecer la gestión de la compañía, garantizando la sostenibilidad futura del sistema aeroportuario español en red: "La mayor eficacia de AENA será un estímulo al sector del transporte aéreo en España y a los sectores estratégicos vinculados, como el turismo y el comercio, y favorecerá el desarrollo internacional de la compañía".
Ana Pastor ha recordado que AENA no recibe un euro de los Presupuestos Generales del Estado y vive de los ingresos que obtiene por su política comercial y por tarifas. Además, anunció que no subirán las tasas aeroportuarias el próximo año y avanzó la aprobación de un marco regulatorio que establecerá cada cinco años las condiciones y los niveles de calidad del servicio y el marco tarifario.
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