Carmena adelanta quince días su crisis de Gobierno

La alcaldesa no tenía pensado destituir a Mayer hasta finales de mes y crea una nueva área, de Igualdad, que asumirá la concejala.

Carmena entró seria en la sala de Prensa para anunciar cambios en su equipo de Gobierno. Tras ella, apareció Celia Mayer esbozando una sonrisa. Dejaba de ser concejala de Cultura pero asumía un nuevo reto, el de ser la delegada de Igualdad del Ayuntamiento, un cargo de nueva creación que resulta de desgajar del departamento de Equidad y Derechos Sociales las competencias que, hasta ahora, ostentaba una Dirección General. «No hay crisis», insistió Carmena ante las preguntas de los medios sobre si la destitución de Mayer había sido un castigo por los errores que ésta ha cometido en lo que va de legislatura.

Comparecieron ambas junto a Marta Higueras, primera teniente de alcalde. Entre las tres se esforzaron por amortiguar el impacto mediático derivado del adiós de la polémica Mayer como delegada de Cultura. «La noticia hoy es que el Ayuntamiento crea un Área de Igualdad ante el alarmante incremento de las cifras de violencia de género, con un número intolerable de mujeres asesinadas, que no muertas, hasta 21 en lo que va de año, casi el doble mensualmente», señaló Higueras.

Este anuncio, sin embargo, llegaba después de varias horas en las que se cruzaron versiones contradictorias en torno al futuro de Mayer y a las tensiones que esta remodelación estaba generando en el seno de Ahora Madrid. La «Cadena Ser» adelantó al mediodía el cese de Mayer en Cultura. A primera hora de la tarde, «El País» informó de que Izquierda Unida había logrado parar el golpe: Carmena habría ofrecido, según este diario, una nueva concejalía, Investigación Sociológica, que Mayer habría aceptado en un primero momento. El rechazo de algunos concejales, especialmente los pertenecientes a IU, habrían hecho cambiar a Mayer de opinión y a hacerse fuerte en el área de Cultura. La decisión final, al menos de puertas para fuera, parece calmar las aguas: «Somos un equipo particular y hay una diversidad muy sana. Cuando en nosotros hay debate, hay una tendencia para hablar de crisis, pero no hay crisis», señaló a este respecto la alcaldesa.

No es la primera vez que un grupo minoritario de concejales modifica el criterio de Carmena. En esta legislatura se ha visto cómo la alcaldesa ha tenido que plegarse a las indicaciones del concejal de Economía y Hacienda –como en su enfrentamiento con Montoro– o a las presiones de colectivos okupas como el Patio Maravillas. La explicación a ello hay que buscarla en que Ahora Madrid no es un partido al uso, con una estructura piramidal. El poder de alcaldesa debe coexistir con el equilibrio de fuerzas entre las corrientes que alumbraron la candidatura: Podemos, Izquierda Unida, Equo, Ganemos y Madrid 129, entre otras.

Tal y como avanzó la propia Carmena, su intención era hacer públicos los cambios en su Gobierno a finales de marzo, pero las filtraciones le obligaron a adelantarlo a ayer. De hecho, la alcaldesa aún no tiene una solución definitiva para Cultura: lo asumirá ella temporalmente. Tampoco fueron capaces ayer de explicar nada sobre qué competencias y objetivos tendrá la nueva Área de Igualdad. En lo que concierne al área de Cultura y Deportes, los planes del equipo municipal pasan por una reestructuración de Madrid Destino, así como de las competencias de Turismo, además se quiere crear nuevos cargos intermedios. Desde Cibeles aclararon que el objetivo de que Carmena asuma este departamento no es otro que el «de analizar su configuración y realizar un nuevo diseño que le otorgue mayor agilidad y eficacia».