El patronato de la Marcial Lalanda echa a andar

Representantes de la escuela de Batán ya cuentan con el apoyo de la Comunidad para continuar como centro de tauromaquia.

El espíritu taurino se resiste a abandonar la Venta del Batán. Después de que el Ayuntamiento de Madrid anunciase su voluntad de negociar con los antiguos usuarios de la finca municipal para cumplir el acuerdo plenario que marca como «obligatorio» el uso vinculado a la tauromaquia del emplazamiento, ayer por la mañana se reunieron en la plaza que lleva el nombre de José Cubero «Yiyo» representantes de Tauromaquias Integradas y de diversas asociaciones, peñas y plataformas para perfilar la hoja de ruta. El objetivo de los aficionados es construir un patronato en torno a este histórico centro educativo taurino que aúne «toros, escuela, cultura, turismo, innovación e investigación».

El asunto que aleja a las partes es la recuperación de las exhibiciones con toros en las instalaciones. Mientras que una de las caras visibles de la resistencia, Enrique Martín Arranz, asegura que la voluntad de los taurinos es recuperar las clases prácticas y los espectáculos, fuentes municipales afirman que entre los usos que baraja el Gobierno que dirige Manuela Carmena no están «en ningún caso» los que implican la vuelta de los toros a la Venta del Batán.

En la reunión intervinieron las cabezas visibles del movimiento de apoyo a la salvación de la escuela Marcial Lalanda: Enrique Martín Arranz, José Luis Bote, y José Miguel Arroyo «Joselito», además de un psicólogo, un veterinario, y un biólogo. Todos insistieron en que la defensa de la tauromaquia «debe pasar por una educación más profesional y avanzada y que se apoye en diversos ámbitos, incluidos los científicos, que aportan los argumentos más sólidos».

La forma del proyecto asociativo aún no está clara, aunque las opciones de organización en plataforma u observatorio cobran fuerza. «La unión y la cooperación son las únicas vías para mantener y fomentar la tauromaquia». indicaron. Los vocales taurinos aseguraron que hasta 22 entidades se habrían interesado ya en asociarse con El Batán, que contaría con el apoyo de la Comunidad de Madrid, y según Martín Arranz, previsiblemente también con el del Ayuntamiento de la capital. «Será un centro de tauromaquia con proyección internacional que atraerá turismo a la región», añadió.

La dirección de la escuela de tauromaquia Marcial Lalanda reconoció que llevan «más de un año» trabajando intensamente desde el silencio para anticiparse a las intenciones del Ayuntamiento de Madrid de cerrar el centro. Tanto Martín Arranz como «Joselito» recalcaron que el objetivo es «recuperar el espíritu de El Batán como gran centro taurino que genere afición y forme personas y toreros». Para lograr esta meta los dirigentes aseguraron que se apoyarán en las nuevas tecnologías, y crearán un centro de investigación de tauromaquia en el que colaborarán varias universidades que esperan esté en funcionamiento en unos meses.

Representantes de Tauromaquias Integradas explicarán el miércoles los pormenores del plan que los antiguos gestores de la Venta del Batán, «un diez por ciento del proyecto final», según Martín Arranz.