Carabanchel

Nadie indemnizará a las 18 familias de Carabanchel

Las aseguradoras no resarcirán a los vecinos al tratarse de un derrumbe y no de un incendio y culpan de lo sucedido al Ayuntamiento

Durante el día de ayer continuaron los trabajos para derribar la parte del inmueble que queda en pie. Una vez acabada esta labor, no está previsto levantar allí un edificio de nuevo
Durante el día de ayer continuaron los trabajos para derribar la parte del inmueble que queda en pie. Una vez acabada esta labor, no está previsto levantar allí un edificio de nuevolarazon

Las aseguradoras no resarcirán a los vecinos al tratarse de un derrumbe y no de un incendio y culpan de lo sucedido al Ayuntamiento

Pasadas 72 horas del derrumbe de sus casas, los vecinos del número 5 de la calle Duquesa de Tamames en Carabanchel se preguntan quién se hará cargo de las indemnizaciones. Incluso se cuestionan si alguien lo hará. Son 18 familias que se encuentran sin nada y en la casilla de salida de un largo camino burocrático y, posiblemente, judicial. Su primer deseo, el de volver a levantar sus hogares en la misma parcela, se desvaneció pronto. Desde el Ayuntamiento se insiste en que los trabajos que han llevado a cabo hasta ahora los técnicos municipales desaconsejan esta opción. «Mi hija tiene hecha su vida en este barrio y los niños van al colegio cerca, queremos volver a tener nuestras casas aquí», reconocía apenas unas horas después del derrumbe la madre de una de las afectadas, pero no será posible.

Descartada esta opción, todo lo demás son incógnitas. Las empresas aseguradoras –tanto la del inmueble como las de muchos particulares– ya han comunicado a los vecinos que no pagarán nada. En Madrid, la Ley obliga a las comunidades de propietarios a contratar un seguro para cada inmueble. La legislación establece la necesidad de suscribir una poliza que cubra daños a terceros así como todas las eventualidades que tengan que ver con el fuego o accidentes naturales: incendio, explosión, tormenta, energía nuclear y hundimiento de terreno. Y en ninguno de estos supuestos se puede incluir lo que sucedió en Carabanchel.

La otra duda sobre una posible responsabilidad de la empresa de seguros de la comunidad es la que concierne a las denuncias que había realizado una vecina que en mayo puso en su conocimiento la existencia de grietas. Daños en una pared que fueron discutidos en la reunión de junio de los vecinos y analizados in situ por peritos. El arquitecto de la empresa, sin embargo, aplazó la solución del problema hasta el próximo mes de septiembre.

Con el «no» de las aseguradoras sobre la mesa, los vecinos miran al Ayuntamiento. «Tenemos que estar juntos todos los vecinos, y si nos abandonan, tenemos que armarla», reconoce Ana, una de las propietarias. De momento, el consistorio ha garantizado que todos los afectados tendrán una solución habitacional y la ayuda económica de emergencia que necesiten. La interlocución con el Gobierno de Manuela Carmena, algo que agradecen los vecinos, está siendo permanente a través de la concejala-presidenta de Carabanchel, Esther Gómez. Sin embargo, la posibilidad de que el consistorio se haga cargo de las indemnizaciones sólo podría barajarse si se demostrase alguna negligencia en los técnicos que realizaron la ITE en el inmueble en 2012 y que garantizaron el buen estado de la cimentación. Los técnicos municipales también han descartado que desde 2012 se hayan realizado obras que pudieran tener un impacto directo en la estructura, como la eliminación o reducción de secciones de pilares.

En lo que afecta a los vecinos en una situación de mayor emergencia, el Ayuntamiento de Madrid comenzó ayer a dar soluciones. Ofreció una solución habitacional inmediata a dos familias del edificio derrumbado. Tras las entrevistas personalizadas que los trabajadores sociales han mantenido estos días con todos los afectados, se ha considerado que dar respuesta a la situación de estas personas era prioritario. Así, una familia con cinco miembros, tres de ellos menores, entró ayer por la tarde «en un piso de emergencia y con el tamaño adecuado para que puedan pernoctar todos sus miembros», apuntan fuentes municipales. Además, esta familia percibirá una ayuda semanal para la compra de comida. Otros dos vecinos, una mujer de avanzada edad y su hijo, también aceptaron ayer la solución planteada por el Ayuntamiento y se trasladaron a un piso tutelado.

Sobre la situación del resto de vecinos, la concejala del distrito, Esther Gómez, aseguró ayer que permanecerán en el hotel «todo el tiempo necesario hasta que se encuentren soluciones, no hay límite temporal», aunque matizó que la intención de los servicios sociales es que «estén en hoteles el menor tiempo posible y normalizar su situación cuanto antes».

Un derrumbe

2012

El inmueble pasa la Inspección Técnica de Edificios sin que se detecten daños estructurales. Tan sólo se señalan algunos desperfectos en la fachada, pero nada que suponga un peligro inminente.

Mayo 2015

Los vecinos alertan a la compañía aseguradora por la aparición de algunas grietas sospechosas en el inmueble. Técnicos de la empresa revisan la estructura y programan su reparación.

Agosto 2015

A las cinco de la madrugada el edificio comienza a resquebrajarse despertando a los vecinos, que son desalojados por los Bomberos. Cinco horas después, el inmueble se derrumba.

Septiembre 2015

La compañía aseguradora había programado la reparación de las grietas que amenazaban la integridad estructural del edificio de Carabanchel para la vuelta de las vacaciones.