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Nuevo modelo de gestión para el comercio urbano

La Razón
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El modelo BID tiene su origen en Canadá, como una iniciativa privada por parte de los comerciantes, con el objetivo de desarrollar una estrategia de gestión unitaria para competir con los Centros Comerciales ó «Malls».

En España, la figura que más se asemeja a los BID es la de los Centros Comerciales Abiertos, que comenzó a implantarse a finales de los años noventa. Sin embargo, su fórmula, salvo determinadas experiencias de éxito, está agotada, no habiendo cumplido las expectativas esperadas, si bien, a priori, era considerada una fórmula eficiente y moderna de gestión colectiva del comercio urbano.

Aunque con absoluta probabilidad existen detractores a la implantación de los BID, su figura debería inspirar cualquier modelo de gestión colectiva de las áreas comerciales urbanas que, en un futuro, se pudiera introducir en nuestro país.

Al respecto, serían numerosas las razones: soluciona problemas de financiación, permite el desarrollo de proyectos sostenibles, no tensiona las cuentas públicas y otorga mayor participación a las empresas en la toma de decisiones. Además, se trata de un modelo de éxito demostrado, y, lo que considero especialmente relevante, su puesta en marcha requiere un acuerdo previo y mayoritario del colectivo empresarial.

En COCEM estamos convencidos de las extraordinarias posibilidades que aguardan al comercio urbano, que navega con viento a favor, y para cuya constatación basta observar las apuestas de posicionamiento de muchos retailers. Una gran oportunidad no sólo para los grandes ejes comerciales urbanos, sino también para el denominado comercio de proximidad (de barrio), que deberá no obstante acometer una serie de acciones y actuaciones estratégicas, tanto a nivel individual como colectivo.

Desde el punto de vista individual, el propio comerciante, realizando los esfuerzos necesarios de adaptación, y aplicando estrategias, con componente innovador y tecnológico, basadas en la diferenciación; y desde el punto de vista colectivo, implantando formulas de cooperación y de gestión colectiva, que a buen seguro podría ser la de los BID´s.