El Gobierno exige responsabilidades políticas tras el archivo del caso Guardería

La portavoz regional, Noelia Arroyo, reviste contra quienes pidieron la dimisión de Cachá

La consejera de Cultura y Portavocía, Noelia Arroyo, pidió ayer responsabilidades políticas a todos los que, en su día, pidieron la dimisión de la consejera de Agua, Agricultura y Medio Ambiente, Adela Martínez-Cachá, tras ser llamada a declarar en calidad de investigada por el caso «Guardería» de la Paz. «¿Aquellos que pidieron su dimisión qué van a decir ahora? Habría que pedirles que dimitan o pidan perdón si creemos en un Estado de Derecho y en la Justicia».

Tras la reunión del Consejo de Gobierno, la portavoz hizo referencia al auto del magistrado del Tribunal Superior de Justicia de Murcia (TSJ), Enrique Cañonero, instructor del caso Guardería, que decretó el sobreseimiento de la causa y archivó las diligencias previas que investigaban si existió un presunto delito de prevaricación administrativa en el traslado y demolición de la Escuela Infantil del barrio de La Paz.

Así, el auto recoge que el instructor «no advierte la presencia de los elementos que califican el delito de prevaricación» porque, como se explica, «acerca de si los acuerdos respetaron formalmente la legalidad administrativa, no puede afirmarse que con su adopción los investigados pusieran su voluntad sobre los intereses que la ley protege y que lo hiciera con la gravedad propia de una conducta, que pueda ser calificada de injusta y arbitraria».

Por lo tanto, Arroyo instó a los responsables políticos que habían pedido la cabeza de Martínez-Cachá que se pronunciasen, «porque los políticos somos personas y tenemos familias. No podemos precipitarnos y hay que evitar juicios y condenas populares, porque al final la Justicia es la que resuelve y hay que ser respetuosos con sus tiempos, que siempre nos han dado la razón».

Por su parte, el portavoz del Grupo Parlamentario Popular, Víctor Martínez, pidió a Ciudadanos que tuvieran en cuenta el archivo de dicha causa, y no lancen juicios de valor precipitados sobre el presidente de la Comunidad, Pedro Antonio Sánchez.

«¿Qué hubiese ocurrido si el presidente hubiera accedido a las presiones de Tovar (PSOE) y hubiese cesado a la consejera antes de conocer la resolución judicial que ha determinado que no existió delito de prevaricación?».

Así, advirtió a la formación naranja de valorar «con quién se reúne» y respete la presunción de inocencia, confíe en Pedro Antonio Sánchez, y deje trabajar a la Justicia con celeridad.

En clave de humor, Arroyo aplaudió la sentencia del TSJ y anunció que se «tomarán unas cañas con Martínez-Cachá para celebrarlo».