Beltrán Pérez propone una «gran sede» municipal en la Cartuja

El candidato popular a la Alcaldía de Sevilla presenta su primera gran iniciativa de ciudad para unificar todos los servicios municipales y ganar en eficacia y cercanía

Beltrán Pérez, candidato popular a la Alcaldía de Sevilla, presentó ayer su primera gran propuesta de corte electoral: la unificación de servicios, dependencias y trabajadores del Ayuntamiento y sus entes satélites en un «edificio de vanguardia» a construir en los terrenos de la Cartuja, que actualmente ocupa la Gerencia de Urbanismo. Se trata de una iniciativa surgida del «consejo de ciudad» en el que trabajan expertos de todos los ámbitos para elaborar el programa electoral del PP y un «modelo de ciudad» propio.

Dichos terrenos, según Beltrán Pérez, no sólo son de titularidad municipal, sino que cuentan con 38.324 metros cuadrados edificables para usos terciarios, con una altura máxima de seis niveles, y 10.873 metros cuadrados de espacios libres. El candidato apuesta por sustituir las instalaciones prefabricadas de este espacio por un gran edificio dotado de los más modernos avances y tecnología de «última generación» en materia de sostenibilidad ambiental, eficiencia energética, accesibilidad y digitalización.

Se trataría de reunir a unos 2.100 empleados municipales ajenos a los «servicios territorializados» que necesariamente deben estar implantados en los distritos y barrios. Sería, así, una «gran sede política y administrativa» que aglutinaría desde instancias políticas como la Alcaldía o los grupos municipales, a funcionarios del propio Ayuntamiento, el Instituto Municipal de Deportes (IMD), la Agencia Tributaria, la Gerencia de Urbanismo o de la Empresa Metropolitana de Aguas (Emasesa), por ejemplo, al objeto de «facilitar» a la ciudadanía los trámites y gestiones, «simplificar» tales operaciones y «concentrar las sinergias» de la propia administración local.

Para el diseño del edificio sería convocado un concurso internacional de ideas. El proceso de creación total requeriría de un plazo de cinco años y una inversión de 53 millones de euros.

La Casa Consistorial de la Plaza Nueva quedaría para «usos ciudadanos de excelencia» y las restantes 26 sedes institucionales como el edificio Laredo, el edificio Metrocentro, el Pabellón Real, el Hogar Virgen de los Reyes o el inmueble municipal de la calle Pajaritos, entre otros, serían destinados a «usos ciudadanos», generando un verdadero «beneficio» para la ciudad. La operación implicaría un nuevo «plan de movilidad» para dicha zona.