Homenaje

El Sabio vuelve a Hortaleza: “Luis Aragonés es de todos”

El Ayuntamiento de Madrid descubre un busto con la efigie del futbolista y entrenador en el barrio de su infancia

MADRID, 01/02/2023.- El alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, pronuncia unas palabras en el acto de descubrimiento de un busto en recuerdo al exseleccionador de fútbol Luis Aragonés, que fue vecino del distrito de Hortaleza
MADRID, 01/02/2023.- El alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, pronuncia unas palabras en el acto de descubrimiento de un busto en recuerdo al exseleccionador de fútbol Luis Aragonés, que fue vecino del distrito de HortalezaJ.P.GANDULAgencia EFE

Nueve años después de dejarnos, Luis Aragonés regresó ayer al punto de partida. A su barrio, a Hortaleza, con su gente. El alcalde de la capital, José Luis Martínez-Almeida, presidió la ceremonia en la que se descubrió un busto con la efigie del Sabio en la plaza de Chabuca Granda. Allí se reunieron decenas de vecinos y aficionados que se sumaron a este homenaje: «Desde Hortaleza, rodeada de recuerdos de mi infancia, les llevo a todos ustedes en el corazón por el inmenso afecto que muestran hacia mi padre, mi familia y hacia mí... No tengo palabras...», destacó su hija María José. También tomó la palabra en el acto su hijo mayor, Luis, que agradeció al consistorio la iniciativa. Y no pudo, o no quiso más bien, evitar animar a los colchoneros allí congregados a que corearan el nombre de Luis, en recuerdo de sus noches grandes en el Vicente Calderón.

Estuvieron presentes representantes de otros clubes, como Emilio Butragueño; el presidente de la entidad rojiblanca, Enrique Cerezo; y el exalcalde José María Álvarez del Manzano. Para Almeida, existe la necesidad de recordar «en mayúsculas» a aquellos «que fueron grandes en esta ciudad» y que «nos hicieron mejores a todos». El alcalde destacó que, aunque los atléticos sienten «más suyo» a Aragonés, «Luis es de todos», pues con su trayectoria «traspasó las fronteras de las aficiones».

Y es verdad. Lo hizo por su dimensión como futbolista y por su carácter indomable. No se rindió nunca en el terreno de juego. Tampoco cuando fue víctima de una de las más indignas campañas que se recuerdan en nuestro fútbol. Orquestada por quienes, desde el pensamiento único y dominante, se creen, entre otras cosas, con la facultad de designar y destituir seleccionadores del combinado nacional. Chocaron con la integridad de un hombre libre e insobornable. Y pasó a la historia por la forma con la que transformó el fútbol español, al que condujo al éxito tras décadas de sinsabores con la conquista de la Eurocopa de 2008. Porque la España campeona del mundo nunca hubiera sido posible sin el impulso del sabio que ha vuelto al barrio.