Congreso regional
Cinco claves para entender el nuevo PSOE madrileño
Con el abrazo del presidente a Óscar López, los socialistas madrileños echan a andar haciendo bandera del «sanchismo» y con mayoría femenina
«Les vamos a ganar en 2027 en las elecciones autonómicas, municipales y generales. Ganaremos en Madrid con un nuevo presidente solvente, ejemplar y socialista como Óscar López». Con estas palabras de Pedro Sánchez, y la ovación de los asistentes, el PSOE madrileño cerró su XV congreso regional. Un «subidón», en palabras del propio López , y en el que se han trazado las líneas maestras para intentar arrebatar la Puerta del Sol a Isabel Díaz Ayuso dentro de dos años.
«Podemización» del partido
En su discurso final, Sánchez reincidió en el relato que caracteriza al PSOE de esta última etapa: el partido se considera víctima de una suerte de conspiración entre los dos partidos de la oposición y los grandes capitales. Un argumento utilizado frecuentemente por Podemos, que el PSOE ha hecho suyo a nivel nacional y que explotará también en Madrid. «Aquí no tenemos a la internacional ultraderechista, sino a la multinacional ultraderechista», dijo Sánchez, acusando a la oposición de «esparcir bulos» en «pseudomedios digitales», conformando una «coalición entre los que tienen el dinero, y Vox y el PP». La creación de esta «amenaza externa» fue una de las tónicas de un Congreso que, antes de empezar, recibió a los asistentes con imágenes de Milei, Orban, Meloni, Trump, Musk y Ayuso, mezcladas con ataques neonazis.
Sánchez Acera, número dos
Se esperaba un puesto importante para ella y, finalmente, se confirmó la noche del sábado. Pilar Sánchez Acera será la nueva secretaria de organización del PSOE madrileño y, por tanto, «número 2» del partido en la región. Un nombramiento que, desde el PP, ha sido visto como un «pago por los servicios prestados». No en vano, la ex jefa de Gabinete de López fue quien envió al anterior secretario general madrileño, Juan Lobato, los correos sobre los presuntos delitos fiscales del novio de Ayuso. Una situación, por otro lado, que desembocó en la dimisión de Lobato. Sin embargo, con su nombramiento, el PSOE pretende materializar su confianza en ella por un lado, y hacer «oídos sordos» a su señalamiento judicial por otro.
Núcleo duro femenino
López también había avanzado que las mujeres tendrían peso en su nueva Ejecutiva. Y así ha sido: 24 mujeres y 23 hombres, en una lista que obtuvo más del 83 % de los apoyos. Además de Sánchez Acera, destaca la presencia de Paca Sauquillo como nueva presidenta del PSOE de Madrid, «aportando su dilatada experiencia y compromiso con los valores socialistas». Mientras, el «compromiso con la educación pública» estará encarnado por Hilda Jiménez, en la Secretaría de Universidades. No en vano, uno de los flancos de los ataques socialistas a Ayuso será el sistema universitario. ‘
Cristina González (Política Municipal), Silvia Monterrubio (Políticas Sociales), Mónica Carazo (Acción Electoral), Lorena Morales (Igualdad), Carmen Mena (Adjunta a Organización), María Caso (Cultura) y Elena Marín (Lgtbi), serán otras de las mujeres con puestos de relevancia en el nuevo organigrama.
En lo que se refiere a los nombramientos «masculinos», el secretario general apostó por el actual delegado de Gobierno, Francisco Martín, especialmente beligerante en los ataques al Gobierno y Ayuntamiento de Madrid, como secretario de Política Institucional. Por su parte, el diputado Javier Guardiola, muy vinculado a las Juventudes Socialistas, será el portavoz de la Ejecutiva, a la vez que se encargará de Política Autonómica.
La próxima gran cita será la composición del grupo parlamentario en la Asamblea de Madrid. Y es que aún deben designar quién se encarga de la portavocía y, por tanto, de enfrentarse todas las semanas con Isabel Díaz Ayuso en el hemiciclo de Vallecas.
Vivienda
Una de las mesas principales del Congreso giró en torno a la vivienda. Pese a contar con un Ministerio en la materia gobernado por Isabel Rodríguez, que también participó en el acto, el partido incidió en sus críticas al PP y su «modelo de especulación». «La barra libre para la política de vivienda no sirve. La barra libre son los pisos turísticos que angustian a la gente y que se cargan las ciudades. La barra libre es dedicar más del 80% de tu sueldo a pagar un alquiler y la barra libre es que aquí no se construyan viviendas públicas porque primen los intereses de los particulares y la especulación sobre el suelo. Eso es lo que tiene que cambiar a través de este congreso bajo la presidencia de Óscar López», aseguró la ministra. De esta forma, la vivienda será otro de los caballos de batalla del socialismo en la región.
El «amigo catalán»
El elegido como primer padrino de Óscar López fue el presidente de la Generalitat de Cataluña, Salvador Illa. Su presentación estuvo prácticamente a la altura de la de Pedro Sánchez. Y es que el PSOE-M considera al líder catalán un espejo en el que reflejarse. La complicidad entre ambos fue total. Illa apostó por una «prosperidad compartida» entre las dos autonomías. «Cataluña quiere un Madrid que nos permita trazar un eje de progreso entre Madrid, Cataluña y España», aseguró el mandatario catalán. «Madrid y Cataluña juntas son imparables. Vamos a por las tres en raya: España, Cataluña y Madrid», respondió a su vez López.