Motor

Nuevas dificultades para Nissan en Barcelona

Las escasas ventas de uno de los modelos que fabrica en colaboración con otra marca, la pick up Mercedes Clase X, fuerza un plan de viabilidad que se presentará este verano

Trabajadores de Nissan protestan ante el consulado japonés de Barcelona
Trabajadores de Nissan protestan ante el consulado japonés de BarcelonaAndreu DalmauEFE

El cese de la fabricación de la Mercedes clase X, una “pick-up” que se hacía en la misma cadena de montaje que las de Nissan y que dejará de producirse el próximo mes de mayo, pone en entredicho nuevamente la rentabilidad de la planta de Nissan situada en la Zona Franca de Barcelona. La dirección de la empresa presentará un plan de viabilidad en julio y no se descarta ningún escenario, si bien el cierre de las instalaciones no se contempla por el momento.

Hay que recordar que esta fábrica ha perdido diferentes modelos en los últimos tiempos. En 2018 cesó la fabricación del Pulsar y el año pasado perdió la furgoneta NV200, así como su versión de pasajeros, denominada Evalia. Solo le queda la versión eléctrica de la NV200 y la línea de fabricación de las “pick-up” donde, además de la Mercedes, se producen las Nissan Navara y el Renault Alaskan.

La Mercedes Clase X no parece rentable para los directivos de la firma de Stuttgart, por lo que han decidido el cese de la producción a pesar de que ello supone el pago de fuertes indemnizaciones a Nissan por suspensión de contrato, que estaba en vigor hasta 2026. Pero la más perjudicada por esta situación es la planta catalana ya que el Mercedes X suponía la quinta parte de la producción de esta factoría. En concreto, durante el pasado año su hicieron 11.150 unidades de Mercedes X y la producción total de Nissan Barcelona fue de 55.495 vehículos.

Ante este nuevo escenario no se descarta la posibilidad de otras reducciones de empleo en la planta que, por otra parte, ya sufrió el pasado año un plan que mermó los puestos de trabajo, al pasar de 3.000 a 2.400. Aun así, pueden ser demasiados para las nuevas circunstancias ya que una de las medidas del futuro plan de viabilidad podría ser la reducción de los turnos de trabajo de los dos actuales, a sólo uno.