54.700 euros/minuto: las pérdidas que provocará un Brexit duro en el sector del motor

El parón de la producción en Reino Unido puede costar a las marcas de coches europeas 5.700 millones de euros

La aplicación de un Brexit duro puede suponer un coste de 5.700 millones, por que que puede tener consecuencias catastróficas para el sector de automóvil en opinión de los representantes de las principales marcas automovilísticas europeas ya que, en su opinión, el libre comercio sin barreras es crucial para mantener el éxito de un sector como este que está profundamente integrado.

La aplicación de los aranceles a automóviles y furgonetas podría suponer un coste cercano a los seis mil millones, por lo que los directivos de las industrias de este sector solicitan que se descarte la posibilidad de un no-acuerdo para salvaguardar el futuro de la industria automovilística europea.

A falta de un mes de que el Reino Unido abandone la UE, la industria automovilística europea ha hecho hoy un llamamiento unánime para que el Reino Unido y la UE eviten un Brexit sin acuerdo. Las organizaciones que representan a los fabricantes de vehículos y piezas de recambio de toda la UE se muestran muy preocupados por el impacto que un Brexit duro y sin acuerdo podría tener en uno de los activos económicos más valiosos de Europa.

Porque la industria europea del automóvil es una de las que aporta un mejor saldo comercial y un elevado número de puestos de trabajo directos e inducidos. Actualmente produce 16,5 millones de automóviles al año y emplea a 13,8 millones de personas., uno de cada 16 trabajadores de la UE.

Los empresarios advierten que las repercusiones del Brexit sin acuerdo serán muy graves ya que provocará un cambio radical en las actuales condiciones comerciales, con miles de millones de euros de aranceles, que amenazarían con afectar a la competitividad de la industria y el comercio en general. Argumentan que el Brexit supondrá una grave alteración de la cadena de producción "just-in-time"actual de la industria. Solo un minuto de interrupción de la producción en Reino Unido podría costar 54.700 euros (50.000 libras esterlinas).