Conducir en condiciones meteorológicas adversas puede ser un verdadero desafío, especialmente en invierno. Lluvia intensa, nieve, hielo o niebla pueden dificultar la visibilidad y aumentar el riesgo en carretera. Por eso, llevar ciertos elementos en el coche puede marcar la diferencia entre un trayecto seguro y una situación peligrosa.

Si no quieres que una tormenta te pille desprevenido, aquí tienes los elementos imprescindibles que debes llevar en tu vehículo para capear el temporal sin sobresaltos.

1. Rascador de hielo y líquido anticongelante

Si vives en una zona donde las temperaturas caen en picado, un rascador de hielo es esencial para eliminar la escarcha del parabrisas y garantizar una visión clara antes de arrancar. Complementarlo con líquido anticongelante en el sistema de limpiaparabrisas evita que el agua se congele y te deja preparado para cualquier ola de frío.

2. Cadenas o neumáticos de invierno

En zonas donde la nieve y el hielo son habituales, llevar cadenas para la nieve o contar con neumáticos de invierno es fundamental. Las cadenas proporcionan tracción adicional en carreteras cubiertas de nieve, mientras que los neumáticos de invierno están diseñados para ofrecer mejor agarre en temperaturas bajas.

3. Manta térmica y ropa de abrigo

Si quedarte atrapado en la carretera por una nevada es ya de por sí una situación incómoda, hacerlo sin ropa de abrigo o una manta térmica puede convertirlo en un problema serio. Estos elementos ayudan a mantener la temperatura corporal en caso de avería o retención prolongada.

4. Linterna y batería externa para el móvil

Una linterna de emergencia puede ser vital si tienes que revisar el coche en la oscuridad o si la visibilidad es baja. Además, una batería externa para el móvil te permitirá mantener tu teléfono operativo en caso de emergencia.

5. Kit de emergencia con comida y agua

Si te ves atrapado en una retención por una tormenta o nevada, un pequeño kit con agua y algo de comida no perecedera (barritas energéticas, frutos secos o galletas) te ayudará a sobrellevar la espera.

6. Chaleco reflectante y triángulos o luces de emergencia V-16

Son obligatorios en caso de avería o accidente. El chaleco reflectante permite que los demás conductores te vean en condiciones de poca luz, mientras que los triángulos de emergencia o las luces V-16, que pronto serán obligatorias, alertan a otros conductores de tu presencia en la vía.

7. Líquido limpiaparabrisas y escobillas en buen estado

La lluvia y la nieve ensucian rápidamente el parabrisas, por lo que llevar líquido limpiaparabrisas adecuado para bajas temperaturas y revisar el estado de las escobillas es fundamental para una buena visibilidad.

8. Cable de arranque y pala plegable

Las bajas temperaturas pueden descargar la batería del coche, por lo que unos cables de arranque pueden evitar que te quedes tirado. Si vas a circular por zonas con riesgo de nevada, una pala plegable te ayudará a despejar el coche si queda bloqueado por la nieve.

9. GPS o mapa físico

Si la tormenta es fuerte y la cobertura falla, un GPS independiente o un mapa en papel pueden ser de gran ayuda para orientarte en rutas complicadas.

10. Botiquín de primeros auxilios

Nunca está de más contar con un botiquín de emergencia que incluya vendas, desinfectante, tiritas y medicamentos básicos. Puede ser crucial en caso de pequeños accidentes o cortes.

Más vale prevenir que lamentar

Llevar estos elementos en el coche puede marcar la diferencia entre un viaje seguro o una situación complicada. La meteorología invernal es impredecible, pero con una preparación adecuada, podrás afrontar cualquier temporal sin sobresaltos.