Los murcianos responden al confinamiento: solo cuatro denuncias en tres días

Según la Policía Local de Murcia, los ciudadanos de la capital del Segura han entendido a la perfección que hay que quedarse en casa. Así lo han confirmado fuentes policiales a LA RAZÓN, en la cuarta jornada después de que el Gobierno central decretara el estado de alarma por el coronavirus. Unas medidas drásticas pero que han sido bien acogidas por la ciudadanía, y que desde el domingo hasta la jornada de ayer únicamente se han registrado cuatro denuncias por incumplimiendo de la ley.

De esta forma, las patrullas de Protección ciudadana han recorrido las calles de la ciudad con el fin de garantizar la seguridad de los ciudadanos y hacer cumplir la orden nacional de confinamiento para evitar la propagación del coronavirus entre la población. Así, desde que se pusiera en marcha esta situación extraordinaria, los agentes de la Policía Local de Murcia han interpuesto cuatro denuncias a ciudadanos que no han cumplido con lo estipulado a nivel nacional.

La primera tuvo lugar el pasado lunes por la noche en una pedanía de Murcia, cuando los agentes observaron a un joven de 18 años transitando por las calles de la ciudad con un vehículo de movilidad personal, un monopatín. El individuo, al detectar la presencia policial, inició una actitud evasiva para que no lo detuvieran, siendo conscientes los agentes de que a esa hora el joven no podría excusarse diciendo que había ido a la farmacia o al supermercado, únicas razones contempladas para salir de casa durante el estado de alarma.

Tras interceptarle e informarle de la situación, los agentes le requirieron una explicación por la que se encontraba fuera de su domicilio, a lo que el joven respondió que se dirigía a su casa tras haber estado en el domicilio de un amigo, algo que tampoco está permitido hasta que finalice el estado de alarma nacional.

Las otras tres denuncias tuvieron lugar en la jornada del martes. Primero, un hombre de 50 años fue visto sentado en un banco en una zona ajardinada de Murcia. Se encontraba bebiendo una botella de un litro de cerveza que había comprado previamente y fue requerido por los agentes locales. Al comprobar que no era una persona que vivía en la calle y conocer que únicamente había salido a “pasear”, fue debidamente denunciado por desobediencia de la Ley 4/2015 de Protección de Seguridad Ciudadana, ya que conocía que no está permitida la actividad fuera del domicilio decretado por el Gobierno.

En la misma tarde, un patrulla también procedió a denunciar a un joven de 26 años que se encontraba cruzando uno de los puentes del Río Segura que cruza por la ciudad. Tras ser informado de que no podía pasear libremente, el joven alegó que venía de visitar a su novia, circunstancia no contemplada en la orden del Gobierno central.

Finalmente, fue en la noche del martes cuando en otra pedanía de Murcia, una patrulla de Vigilancia Preventiva observó un turismo circulando en un barrio de dicha localidad, y tras saber que no vivía en dicha zona, se le indicó que regresara a su domicilio. No obstante, cinco minutos después, los agentes volvieron a verle rondando en otro barrio, por lo que se procedió a interponerle la denuncia. “Dijo que no pasaba nada, que daba una vuelta y se iba. Eso, lógicamente, no está permitido”.

Lo primero es informar

Desde la Policía Local recuerdan que lo primero que se hace al observar a un ciudadano en actitud extraña es preguntarle e informarle sobre el estado de alarma, y tras saber si conoce o no la situación en la que se encuentra todo el país, se procede a denunciarle, permitiendo así que el afectado formule alegaciones al Instructor que gestionará la pertinente sanción. “Lo más importante ahora es la prevención. Pero estamos satisfechos, porque los ciudadanos de Murcia están respondiendo bien, han entendido que hay que proteger a los más vulnerables, y la gran mayoría están actuando en consecuencia de la situación”.