Inmigración

La crisis migratoria provoca un enfrentamiento entre Gobierno regional y central por la gestión

La fuga de nueve inmigrantes de Cartagena impulsa al PP a pedir la dimisión del delegado del Gobierno, y este pide no generar «alarma social»

Cinco pateras con 70 inmigrantes llegaron en las últimas horas a la Región
Setenta ciudadanos argelinos y subsharianos todos ellos varones excepto una mujer que llegaron el pasado miércoles en cinco embarcaciones al litoral murciano, pasan la cuarentena al haber estado en contacto con positivos en Covid-19, en una carpa instalada en el puerto de pescadores de Santa Lucía en Cartagena, vigilados por la policía nacional, después de que ayer se escaparan nueve de ellos. EFE/Marcial GuillénMarcial GuillénEFE

La continua llegada de pateras a las costas de la Región de Murcia, los cuatro inmigrantes positivos en coronavirus, la fuga de nueve de los 70 tripulantes de los últimos días, y el cierre del Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) ha provocado que desde la filas populares hayan pedido la dimisión del delegado del Gobierno en la Región, José Vélez, al no poder asumir las competencias migratorias correspondientes a una crisis de esta magnitud.

El portavoz parlamentario del PP, Joaquín Segado, aseguró que la «incapacidad» del delegado «ponía en riesgo la salud de los murcianos», mientras que el propio Vélez reprochó que se utilizara la crisis migratoria para «generar alarma social» e intentar sacar rédito político, y reclamó «respeto» para los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado.

Un frente de acusaciones entre ambos bandos que ha puesto en tela de juicio la complicidad con la que las administraciones han trabajado durante las últimas semanas para solventar la crisis de la inmigración.

Primero fue con el alojamiento en el que poner en cuarentena a los inmigrantes que dieran positivo en coronavirus, y posteriormente con la fuga de nueve de los últimos 70 que llegaron a las costas de la Comunidad, de los cuales, al cierre de esta edición, ya se había localizado a seis.

Tanto es así, que el propio consejero de Presidencia y Hacienda, Javier Celdrán, condenó ayer tras la reunión del Consejo de Gobierno que desde la Administración central «no se haya custodiado suficientemente bien» a los inmigrantes irregulares, y pidió una actuación «contundente» para evitar otra posible fuga de afectados o de contactos estrechos de los positivos en Covid.

Incluso, pese a ofrecer los servicios de la Comunidad para aislar a los posibles casos en el Albergue juvenil de El Valle, dijo no entender el cierre de los CIE. «No parece lógico ni responsable».

En este reproche de acusaciones también intervino el portavoz del PSRM y viceportavoz parlamentario, Francisco Lucas, quien tachó de «vergonzoso» que los ‘populares’ cuestionen la actuación de los Cuerpos policiales y la gestión del Gobierno central en la recepción de pateras.

«Si tuvieran un poco de memoria y de vergüenza, agacharían la cabeza antes de hablar», y reprochó a Segado ser el responsable de no contar con un Centro de Atención Temporal de Extranjeros (CATE), durante el tiempo en el que fue presidente de la Autoridad Portuaria «al no facilitar los terrenos».

Una infraestructura que, por otra parte, fue reclamada también por el sindicato policial CEP, que tachó de «chapuza» la forma en la que se gestiona la llegada de inmigrantes irregulares a Cartagena, ante la «exposición innecesaria» de los agentes al coronavirus.