Tribunales

Condenan a una profesora en Murcia por arrastrar a una alumna y decirle que "le gustaban mucho los nenicos"

La acusada la cogió de un brazo y de la sudadera y la arrastró hasta otro punto del pabellón, causándole un eritema en el cuello

Audiencia Provincial de Murcia
Audiencia Provincial de Murcialarazon

La profesora de un colegio que arrastró por la sudadera a una alumna menor de edad a la que llamó la atención porque molestaba durante una charla y a la que, además, humilló al decirle que "le gustaban mucho los nenicos" ha sido condenada a 600 euros de multa por un delito leve de lesiones por un juzgado de Instrucción de Cartagena (Murcia).

La sentencia, a la que ha tenido acceso Efe, declara que la conducta de la acusada fue intolerable e impropia de una profesional de la Enseñanza, por lo que el juzgado ha decidido comunicar la misma a la Consejería de Educación del Gobierno murciano por si considera que debe ser sancionada también por la vía disciplinaria.

El relato de hechos probados señala que los mismos se produjeron en abril de 2023 en el pabellón del centro escolar con ocasión de la charla que se impartía en la misma y a la que asistían profesores y alumnos de varias clases.

La acusada, molesta al considerar que la alumna no tenía un buen comportamiento, la cogió de un brazo y de la sudadera y la arrastró hasta otro punto del pabellón, causándole un eritema en el cuello por la compresión de dicha prenda.

Cuando la menor acudió a ver a la jefa de estudios para contarle lo ocurrido, se acercó la acusada diciéndole que dejara de mentir, añadiendo que "le gustaban mucho los nenicos" y que al final iba a tener que poner un parte.

La chica, presa de un ataque de ansiedad, se dirigió al baño, añade la sentencia, desde el que llamó a su madre para contarle lo ocurrido.

El relato de hechos probados recoge así mismo que la acusada admitió en el juicio que arrastró a la alumna porque molestaba y que le hizo aquel comentario que el juez considera vejatorio y humillante, pero negó la agresión.

La sentencia condena a la profesora a pagar una multa de 600 euros y, además, a indemnizar a la alumna con 80 euros por las lesiones sufridas, que curaron a los dos días, y añade que durante el juicio la fiscal del caso pidió su absolución al considerar que había existido un contacto físico profesora-alumna, pero sin causarse lesiones.

El juzgado no estima la petición de la acusación particular, que reclamó también una orden de incomunicación y alejamiento, al no existir situación objetiva de riesgo y porque, además, la alumna, "al parecer", ha cambiado de colegio.