Opinión

El (no) legado político para España...

El Gobierno de Pedro Sánchez empieza a despedirse de la Moncloa en el mismo registro en el que empezó: un mitin. Un mitin contra la oposición, un mitin de propaganda y, lo más original de todo, un mitin sobre lo que no ha sido capaz de hacer en estos casi nueve meses de Gobierno. En la rueda de prensa de las dos ministras, el asunto se centró en la exhumación de los restos de Franco, que iba a tener lugar el pasado 18 de julio y sigue pendiente, y en una nueva ley educativa que no verá nunca la luz.

Lo que no hemos hecho

El mismo carácter de alucinación sectaria, de esas que impiden ver la realidad que se tiene delante, aparece en un balance que con el título de «Gestión del Gobierno. ¿Qué ha hecho el Gobierno de Sánchez?» publicó ayer el gabinete. De tres páginas, algo más de una va dedicada a lo que Sánchez y sus ministros no han sido capaces de hacer porque –lamento el giro infantil de la frase– «no le dejan hacerlo quienes han rechazado los presupuestos». Así que un tercio del balance del Gobierno de Sánchez consiste en lo que NO ha hecho.

Feminismo

Algunas cosas dice haber hecho, claro está. En particular, en este último apartado del feminismo, el documento habla del pacto de Estado contra la Violencia de Género... obviando el detalle de que el Pacto de Estado contra la Violencia de Género fue promulgado bajo el Gobierno de Rajoy en el 2017. Como los pactos de Estado son muy raros en nuestro país, Rajoy buscaba algo muy próximo a la unanimidad. No la consiguió por la oposición de Unidos Podemos, el apoyo progresista del Gobierno de Sánchez. La Ley Integral contra la Violencia de Género, por su parte, es una ley de 2004, e iba a ser modificada según los criterios del Pacto de 2017, el mismo que promocionó el PP. Parece que el Gobierno de Sánchez sólo puede presumir de lo que hace cuando lo había hecho previamente el Partido Popular.

Regeneración

La regeneración es el último de los puntos de los que se enorgullece Sánchez. Presenta como un gran logro su «compromiso con la descentralización y las autonomías», siendo así que le ha sido imposible llegar a un acuerdo para una nueva financiación del Estado de las Autonomías. También se han realizado 42 (ni más ni menos) reuniones sectoriales y se han reactivado las comisiones bilaterales con varias comunidades. Nada se dice de la financiación obtenida por Cataluña, ni del marco de estas negociaciones, que habría desequilibrado aún más el actual Estado de las Autonomías.

La publicación de las declaraciones de bienes de «más de mil cargos» es el segundo gran triunfo. Ni rastro, en este punto, de los dos ministros dimitidos antes de que el Gabinete cumpliera cien días, un record. Tampoco hay ninguna alusión a las sociedades y el patrimonio inmobiliario de varios ministros, entre ellos la de Economía, el de Ciencia y la de Educación. Los progresistas españoles son gente avispada y saben aprovechar las oportunidades. La ocupación de RTVE por la nueva directora y el descrédito al que su nuevo director ha sometido al CIS tampoco están entre las medidas regenerativas, ni la presidencia de la nueva Marca España. Cuando se trata de los amigos, el PSOE siempre ha tratado bien a los suyos. Y, ni que decir tiene, el caso de la tesis de Sánchez no viene al caso. Ni el desprecio hacia el Senado, donde la oposición tenía mayoría absoluta. Todo un magnífico muestrario de lo que se llamó la «vieja política».

Innovación y ciencia

Otro de los logros, según el informe ha sido «facilitar la investigación y compromiso con la innovación y la ciencia». En este punto, de lo único que puede presumir es de haber reunido en un Ministerio, bajo la dirección de Pedro Duque, la Ciencia, la Innovación y la Universidad, que desgajó de Educación de una forma tan llamativa como arbitraria. Esto ha llevado a la elaboración de un proyecto de ley acabado antes de nacer, como la gran ley educativa de Celaá. También se presentó como un aumento importante del presupuesto para Innovación una modalidad de financiación que pocas veces lleva a plasmarse en la realidad.