Opinión

Ser español

El embajador de Panamá le debemos este verano uno de los vídeos más reproducidos. Afortunadamente, don Héctor Cohen-Henríquez no es español. Sus ancestros, judíos sefardíes, fueron expulsados de España y, a través de Portugal, llegaron hasta Holanda y después a Curazao. Luego, a tierra firme americana.

Si don Héctor Cohen-Henríquez, en lugar de ser un panameño de ojos azules, hubiese sido un morenazo andaluz, o un gallego trigueño o un catalán de Lérida –un suponer– no habría podido decir en una grabación que España es un magnífico país, con una Historia grande, que ha de sentirse muy orgulloso de sus aportaciones culturales, políticas, artísticas o religiosas. En apenas unos minutos de película –que se ha hecho viral en internet– este señor compendia la falsedad de la leyenda negra, la importancia del Descubrimiento, el peso del Derecho de Gentes, la belleza de nuestros grandes maestros –de Velazquez a Picasso– y nuestras aportaciones a la Ciencia. Recuerda que el español es la segunda lengua más hablada en el mundo y que nuestro Quijote es el segundo libro más traducido del orbe después de la Biblia. Desvela que merece la pena estar orgulloso de nuestro pueblo, y termina con una pregunta: «¿Por qué se quejan ustedes?».

Como don Héctor no es español nadie le ha contestado: «Seguro que eres rico y por eso no te quejas» o «Es fácil no lamentarse cuando a uno le va bien» o «Algo habrás robado». Este señor ama tanto a España que parece español, lo único que le falta para serlo es avergonzarse de ello.