Opinión

Tezanos, al rescate de La Moncloa

La irrupción de Sánchez eclipsando a Gabilondo, convierte la confrontación en un duelo con Ayuso.

Félix Tezanos, presidente del controvertido CIS, ahora convertido Centro Interno de Salvamento, ha salido al rescate de La Moncloa con una oportuna encuesta que, sin lugar dudas, habrá causado una honda e indescriptible satisfacción a su inquilino temporal. Tras el disgusto de Murcia, el fracaso de Castilla y León y el enorme estropicio de Madrid, siempre tendrá a Tezanos para explicarle el mundo paralelo que le gustaría, pero que no coincide con la realidad. Las encuestas, una tras otra, muestran que el centro derecha seguirá gobernando en Madrid y que la malvada Ayuso, que no se somete a los designios del gobierno socialista-comunista, seguirá siendo la presidenta. Es sorprendente que este tipo de resultados excéntricos o incluso esperpénticos solo le salgan al socialista Tezanos. No sería relevante si el CIS fuera una empresa del PSOE, pero el «pequeño» problema es que lo pagamos todos los españoles y no tiene ningún sentido que sea un caprichoso juguete del aparato propagandístico monclovita. La encuesta preelectoral ofrece un empate entre el centroderecha y el centroizquierda, pero cumple su objetivo de desinformación y erigirse en un elemento de movilización. Esta es la función principal de Tezanos, que es más un activista socialista que un sociólogo.

El presidente del CIS es uno de esos cocineros, que todos hemos sufrido en alguna ocasión, a los que se les va la mano con la sal o la pimienta. La cocina no es lo suyo y ni siquiera hubiera servido para hacer los ranchos en la mili. La desesperación gubernamental ante el resultado en Madrid es tan evidente que confirma que las encuestas le son muy desfavorables. En lo único en que existe una coincidencia universal es en la desaparición de Ciudadanos. Otra pata de la estrategia es situar a Vox al borde de no entrar, ya que le dan un 5,4 por ciento, con lo que se transmite la idea de que la coalición socialista, comunista y populista puede conseguir la victoria. La irrupción de Sánchez eclipsando a Gabilondo, algo en lo que no es necesario esforzarse, convierte la confrontación en un duelo con Ayuso. El escenario no puede serle más cómodo, porque los electores de centro derecha tienen claro que hay que impedir que consiga su objetivo de controlar la comunidad. A esto se añade la inestimable ayuda de Iglesias, porque es el mejor cartel electoral para el PP. La sucesión ininterrumpida de incumplimientos de Sánchez es el argumentario perfecto para movilizar a los electores.