Papa Francisco

El coraje de construir la paz

El Papa Francisco acaba de publicar una recapitulación de cuanto ha escrito y dicho Bergoglio en estos últimos años al filo de la actualidad

En la barahúnda de noticias verdaderas o falsas sobre la guerra en Ucrania y la batalla de propaganda a la que se libran los contendientes no resulta fácil adivinar donde están la verdad o la mentira.

Una sola voz ha sido coherente en esta triste historia: la del Papa Francisco que acaba de publicar un libro titulado “Contra la guerra. El coraje de construir la paz”. Es una recapitulación de cuanto ha escrito y dicho Bergoglio en estos últimos años al filo de la actualidad, dividida en cinco capítulos: trabajemos por la paz, una cultura de la muerte, paz y fraternidad un camino posible, un mundo mejor, invocar.

“El odio, antes de que sea demasiado tarde – advierte- hay que extirparlo de los corazones. Y para hacerlo es necesario el diálogo, la negociación, la escucha, la capacidad de creatividad diplomática, una política capaz de construir un nuevo sistema de convivencia que no se base más sobre las armas, sobre el poder de las armas como disuasivo”.

Porque, según el papa, el conflicto en Ucrania es la enésima barbarie pero la humanidad tiene una memoria corta y olvida fácilmente los horrores de las guerras. “Si recordásemos lo que nos han contado nuestros padres y abuelos nos daríamos cuenta de que necesitamos la paz como nuestros pulmones necesitan el oxígeno”.

Bergoglio recuerda, por ejemplo, la hecatombe que produjeron las bombas atómicas volcadas sobre Hiroshima y Nagasaki y se pregunta:”¿Quién podría imaginar que el espectro de una guerra nuclear so asomaría en Europa? Poco a poco el mundo corre el riesgo de convertirse en el teatro de una tercera Guerra mundial a la que nos acercamos como si fuese ineluctable. Pero tenemos que repetir con fuerza: No, la guerra no es ineluctable”.

No falta en estas páginas una durísima condena de la construcción, posesión y uso de armas cada vez más mortíferas por no hablar del armamento nuclear. Para parar la guerra, las guerras hay que dejar de alimentarlas y quien dispone de armas, desgraciadamente como enseña la historia, acaba por usarlas.