Luis María Anson

Iglesias es un acorazado; Yolanda, una piragua

«Yolanda Díaz debe reconocer todo lo que políticamente le debe a Pablo Iglesias»

Tengo un alto concepto de Yolanda Díaz. Aunque no la conozco personalmente, me parece una mujer constructiva, inteligente, sencilla y hábil negociadora. Políticamente no se puede comparar a Pablo Iglesias. Políticamente, el líder de Podemos es un acorazado; Yolanda, una piragua.

Como una cuestión de hecho, el Partido Comunista, al que pertenece Yolanda Díaz, enmascarado en Izquierda Unida, se ha presentado a todas las elecciones generales durante los últimos cuarenta años. Nunca accedió al poder. Gracias a Pablo Iglesias, que en las elecciones de 2019 se alzó con casi seis millones de votos y más de setenta diputados, el Partido Comunista se incorporó al Gobierno en noviembre de aquel año de la mano del líder podemita, que tiene toda la razón cuando afirma que ha sido Podemos quien convirtió a Yolanda Díaz en ministra, primero, y en vicepresidenta del Gobierno, después.

Pablo Iglesias desembarcó del Ejecutivo porque las encuestas marginaban en Madrid a los podemitas, que disponían de siete escaños y quedaban reducidos a cero. Tuvo un gran éxito personal y en aquellas elecciones elevó a 10 el número de diputados autonómicos. No echó las campanas al vuelo porque la izquierda, derrotada por Isabel Díaz Ayuso, no pudo formar Gobierno autonómico con Gabilondo al frente. Pablo Iglesias se retiró de la primera línea y dio un soberano ejemplo de rectitud y coherencia al dejar inmóviles las puertas giratorias. Pudo convertirse, como tantos otros, en consejero de una gran empresa o presidente de cualquiera de las altas instituciones culturales controladas por el Estado. A muchos nos pareció ejemplar el retorno a su puesto de trabajo en los medios de comunicación.

Parece lógico, claro es, que no esté dispuesto a que Yolanda Díaz desdeñe o ningunee a Podemos y que exija el papel que corresponde a los podemitas en el mundo político a la izquierda del PSOE. Pero no es mi estilo atizar las divisiones. Por el contrario, creo que Pablo Iglesias debe buscar caminos de sosiego y entendimiento, para lo que es necesario que Yolanda Díaz reconozca todo lo que políticamente le debe al fundador de Podemos.

Luis María Anson, de la Real Academia Española.