A pesar del Gobierno

Camelo laico

La Razón
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Señal de modernidad es el laicismo: "Doctrina que defiende la independencia del hombre o de la sociedad, y más particularmente del Estado, respecto de cualquier organización o confesión religiosa". Llevamos más de dos siglos con este camelo, que se ha traducido en hostigamientos a la religión, en particular las judeocristianas, en el acoso a los símbolos religiosos, y en la propaganda constante que procura pintar a la Iglesia como una banda de perversos y abusadores que no han superado el neolítico.

Y es un camelo, porque los enemigos de la religión son con frecuencia también los enemigos de la libertad, y su prédica contra "el poder de la Iglesia"no propicia la libertad humana sino el sometimiento a un poder incomparablemente más usurpador e invasivo: el político y legislativo. En un trabajo reciente, Matthew Frannk evocó al destacado clérigo cristiano norteamericano Richard John Neuhaus, que fue primero pastor luterano y después sacerdote católico ("Individual, Community, and State: How to Think About Religious Freedom", Imprimis, septiembre 2012,http://goo.gl/4nn2Z). Neuhaus escribió en The Naked Public Square en 1984: "Cuando la religión es reducida a nada más que una conciencia privada, el espacio público sólo tiene dos actores: el Estado y el individuo". Esto es exactamente lo que pretenden los socialistas de todos los partidos con su laicismo supuestamente progresista: dejarnos solos e indefensos frente al aliento letal del poder.