Agit-prop de pandereta

Lanzando amenazas, llamando a la provocación, tejiendo una tupida red de mentiras. Así se las está gastando la Asamblea Nacional Catalana este crítico fin de semana. Es lo que tiene el trabajo sucio. Éste es el empeño cuando el objetivo es que el volcán separatista siga vomitando lava y la temperatura del fuego se dispare. Pero seamos ecuánimes: la agitadora Forcadell ha estado cumbre cuando ha dado las gracias al PSOE por haber hecho posible lo que ha perpetrado Artur Mas. ¡Una verdad como un templo!

Y, sin embargo, la actitud cobardona y mojigata de los socialistas queda tapada por la furibunda propaganda y los temerarios anuncios de estos jetas de la ANC. Hablamos de una asociación investigada por Hacienda dadas las sospechas sobre su financiación; de quienes tienen como mínimo millón y medio de ingresos sin justificar; de quienes han reconocido en reuniones internas un descontrol contable de tres pares de narices. ¡¿Éstos son los guardianes de las esencias de la democracia?!

El desafío frente a lo que decida el Tribunal Constitucional vuelve a retratarles como los promotores de un interminable carnaval separatista con ramalazos de verbena. Pero, más allá de la vis cómica de esta vanguardia de choque soberanista, tiremos por elevación: estos tipos están manipulando burdamente a las masas, excitando la radicalización de los ánimos de ciudadanos catalanes de toda condición y edad. Van a fracasar, y aun así convendría que reflexionasen sobre aquella advertencia del clásico: nadie está a salvo de hacer el ridículo; el problema es poner demasiado énfasis.