Chicho a la greña

L9 Indignación

La fiesta rojiblanca del 4-0 al Madrid y la fiesta nocturna en La Finca para celebrar que Ronaldo dejaba de ser veinteañero para ingresar en la quinta de los treintañeros. «Ya has dejado de ser joven, Cristiano. Has cruzado la línea roja de los treinta». A partir de esa edad, opinan los pesimistas, se empieza a ser viejo para el fútbol. Ni caso. Dos fiestas: la rojiblanca, de gozo, y la treintañera de Ronaldo, de indignación.

El Madrid es él y su ecuménica imagen. Perder con honor no es deshonorable. Lo deshonorable es perder como lo hizo en el Calderón: como con desidia, sin fe. ¿Por qué no pudo en el descanso Ancelotti galvanizar a los suyos? Me cuentan que Florentino Pérez, «que es como Rajoy, hombre de meditación, no de arrebatos súbitos», no hará nada contra Ancelotti, pero quiere saber la razón por la que el equipo, tras el insípido e inodoro primer tiempo, no reaccionó. Ancelotti ha fallado como psicólogo. Dicen. Y los jugadores, tanto o más que él. ¿Hubiera sido otro el resultado con «tigres» como Sergio Ramos y Pepe? Esto es lo que se preguntan también los indignados madridistas, uno de los cuales, «un viejo madridista», me recuerda:

–Había en el Real Madrid –vive todavía– un jugador de laureles y oros, importante, vaya, «encoñado» con una «vedette» de rompe y rasga. Dicho jugador corría cada vez menos, peleaba cada vez menos. Don Santiago lo llamó y le dijo, entre severo y socarrón: «Elija usted, ya hoy, digo ya hoy, entre ella, por muy buena que esté, o el Madrid, club que está muy bueno. Ya lo sabe, hoy». Eligió el Madrid.

X11 Laporta

Joan Laporta, como Esperanza Aguirre, cauto, silente. Sin embargo, nadie duda de que ella será, acertadamente, la candidata (segura ganadora) del PP a la alcaldía de Madrid, y Joan Laporta pugnará por la presidencia al Barça. Laporta, por cierto, en Gerona, ha hablado de fijos y variables. Al jugador, sostiene, si vale, hay que pagarle sin mezquindad. Cree, asimismo, que hay que implantar en los contratos con los jugadores tabla de variantes por victorias, títulos y beneficios para el club. «Partido a partido» (Cholo). «Estímulo a estímulo» (Laporta). Progresar es cambiar y transformar para caminar hacia la perfección.

J12 Follón

Carajal, que dicen los argentinos; quilombo, que dicen los mexicanos; follón que decimos los españoles. ¿Es esto España ahora? El PSOE anda entre los suyos chicho a la greña. Podemos, ese volcán arcaicamente marxista, contra la unidad de los Reyes Católicos: parece que sus cerebros proyectan una España a la pata coja y quebrada en forma de reinos de taifas. Y el deporte, con el sol, lo mejor y más loado de España, también engrescado. ¿Tienen razón Villar y Blanco? Demoro mi opinión. Lo que sí sé es que una misma ley para el león y para el buey es carajal, quilombo y follón. A Cardenal no le ha llamado Dios para que pastoree con salero y flexibilidad política a los corderos y los tigres del mundo del deporte. Es un recalcitrante obseso de la ley; y la ley, que sostenía mi antepasado don Eugenio, sobre ser norma, puede ser también arma. De aquel barro suarista del «café para todos», el lodo de este follón, de este quilombo y de este carajal de España. ¡Quién lo iba a pensar, Miquelarena!

V13 Ser querido

Hay quien es admirado, pero relativamente querido. Y hay quien es casi más querido que admirado o tan admirado como querido: Pau Gasol, «el otro Nadal», que digo yo. En los medios norteamericanos uno se percata del amor que destila Pau entre los conciudadanos de Obama. Seduce de él que no presume de currículo y que la sencillez es su más brillante blasón. Formidable su racha de «dobles dobles», catorce seguidos. Lame ya el récord de quince del icono Michel Jordan. Gasol no está haciendo las Américas, sino españolizándolas.