Martín Prieto

El inmutable régimen andaluz

Cuando el Ejército Rojo ya se aproximaba a Berlín, Goebbels aullaba sobre «los imparables avances elásticos sobre la retaguardia» de las tropas alemanas. El atrio por el que está pasando la joven presidenta andaluza denota también una enérgica mirada al retrovisor y una vuelta al parque de atracciones del zapaterismo.

La democracia parió un régimen socialista-sindicalista en Andalucía, única autonomía que nunca cambia de caballos, anclada políticamente en el clientelismo y la subvención. Susana Díaz emula a Manuel Chávez en su compromiso contra la corrupción, sin señalarla, como si fuera un objeto volante no identificado, como si no hubiera convivido con ella desde tierna edad en las Juventudes Socialistas, porque la presidenta no es otra cosa que una funcionaria del PSOE con muchos trienios que dedicó unas horas muertas a una carrera de Derecho más larga que la maratón.

En su huera investidura, muy zapateril, no se ha hurtado ni de imitar a Bibí Aido en su ingreso al místico Ministerio de Igualdad repitiendo eso que se va a dejar la piel en el empeño. No se sabe qué les pasa a las chicas ZP que quieren desollarse el cutis (pellejo en los hombres) cuando de ellas sólo se pretende honradez y sentido común. Tienen mala suerte los andaluces porque sólo de tarde en tarde pueden votar la Presidencia de la Junta, aunque nada hay de ilegal en esta monarquía de socialismo-sindicalismo hereditarios mientras no legislemos otra cosa.

Pero es un apogtema que el poder absoluto, en los despachos y en el tiempo, corrompe absolutamente. A cambio del apoyo y el silencio la presidenta ampliará el frente popular con los comunistas mientras a la jueza Alaya le quitarán el sumario de los ERE por aforamiento, despaciosa o hierática, dará lo mismo y los ladrones seguirán yendo a la oficina. Díaz no va a limpiar de martingalas el régimen andaluz porque supondría cortarse los hilos que la mueven como títere y porque resulta muy complicado rehabilitar a un pirómano (ya arden documentos incriminatorios) en bombero.