Consejo de Ministros

Hacer política

En el año y medio que lleva gobernando el Partido Popular sus bases han echado de menos, y lo siguen haciendo, un poco más de política. De toma de decisiones vinculadas a su programa en materia de ideas y valores, y no sólo gestión, como si la crisis fuera únicamente consecuencia de haber tenido hasta ahora malos contables sentados en el Consejo de Ministros. Si se trata sólo de que cuadren las cuentas independientemente de lo que ocurra con quienes tienen que poner la pasta, que no son otros que los ciudadanos con sus impuestos, en lugar de elecciones bastaría con una buena empresa de «headhunters» que contratara a los mejores gestores, que cazara a los talentos empresariales de cualquier latitud que para eso somos globales, aunque los nacionalistas catalanes no se hayan enterado todavía, y seguro que nos ahorrábamos dinero. Si hacer política es marcar prioridades y tomar decisiones en consecuencia, es obvio que Mariano Rajoy lo ha hecho en estos dieciocho meses, lo que ocurre es que no todos sus votantes parecen estar de acuerdo en que sólo haya existido hasta ahora un objetivo, el de rebajar el déficit, sin acompañarlo con otras medidas que hicieran más digeribles los enormes sacrificios que se les ha pedido, y se les sigue pidiendo, a la mayoría de los ciudadanos que no tienen la suerte de ver lo que ve el presidente cuando habla de que se aleja el pesimismo de España.

Será de la España oficial, porque la otra lo único que entiende es que cada día es más difícil llegar a fin de mes y que, a pesar de los cien mil nuevos empleos del mes de mayo, la cifra de desempleados sigue siendo estratosférica. No hay más que echarle una ojeada a la última encuesta publicada por el CIS para saber qué es lo que de verdad preocupa a los españoles.