La historia siempre es retrospectiva

En este interminable juego de trileros en el que no hay ninguna bolita bajo ningún cubilete existen bondadosos intelectuales europeos que están escribiendo que aunque Syriza y su complemento nazi estén desarrollando un juego teórico virtual en el que el que gana pierde, hay que salvar a Atenas porque es la cuna del pensamiento occidental, lo que subraya el éxito de las novelas de historia-ficción. La historia o es retrospectiva o quimera de manotazos sobre el incierto destino de los hombres. La civilización más antigua es la sumeria (6.700 a. C.) y su escritura cuneiforme en frágil arcilla no permite abarcar su pensamiento. Si se conserva en el Louvre la estela de diorita con el código de Hammurabi, cuyo Talión (ojo por ojo y diente por diente) fue progresista al evitar matanzas tribales por minucias. Grecia despierta 3.500 años después y tiene su cenit en un más próximo 460 (a. C.), pero la UE y el resto de los mortales seguimos esperando las facturas del gran orador populista Pericles que levantó la Acrópolis con artes de comisionista en sobrecostes. Constituye analfabetismo funcional ignorar a Aristóteles, la mayéutica ágrafa de Sócrates, Platón o la olvidada austeridad de Diógenes, que vivía en una tinaja, como también es chauvinismo tener por heleno al macedonio Alejandro. En 1944 Churchill acudió personalmente con tropas para impedir el triunfo de una poderosa guerrilla comunista. Paradojas de la historia: si Stalin hubiera copado Grecia, hoy, con el paréntesis subnormal de la dictadura de los coroneles, el país habría recuperado un Estado deteriorado pero sin necesidad de rescates como el resto de las repúblicas soviéticas ahora socias de la eurozona o la UE. Grecia, sobre la que el Plan Marshall enchufó una manguera de dólares a fondo perdido, necesita más quitas y financiación devuelta cuando se enfríe el infierno, pero no a cambio de chantajes sobre contaminación o una contabilidad pública de ábaco. Grecia está intelectualmente contaminada por siglos de dominio otomano.