La Ley rige en España

Conforme pasa el tiempo, la operación separatista de Cataluña se acerca a una pantomima surrealista y a una maniobra de Convergència Democrática para salvar de la Justicia a los depredadores, presuntos «of course», de las arcas públicas de aquella comunidad, empezando por Jordi Pujol y su clan y terminando por Artur Mas. el tiempo dirá si también pasando por Carles Puigdemont. En definitiva, cada vez aparece más clara la corrupción y aquel 3% denunciado por Pasqual Maragall como los detonantes del radicalismo secesionista. Los Pujol, Mas, CiU... intuyeron la que se les venía encima y aceleraron el «procés». Saben que no se celebrará el referéndum del 1-O, conocen que no podrán eludir las investigaciones, procesos y condenas o absoluciones y son conscientes de la irresponsabilidad institucional que protagonizan. Sin embargo, les da igual, pretenden la misión inviable del camino a ninguna parte. Como dijo hace unos días, creo que Felipe González, «España no se romperá, antes se romperá Cataluña».

Así está sucediendo. Las deserciones se están produciendo en las instituciones. Ahora por goteo y muy pronto proliferarán porque La Ley rige en un Estado de Derecho. Los nacionalistas y separatistas, es verdad, estaban muy mal acostumbrados. Pero llegó la hora de la verdad. Los responsables de vulnerar las leyes quedarán desvelados y asumirán sus culpas. Para las económicas quizá sus conciudadanos les ayuden, no en vano es universalmente conocida la ideosincrasia catalana por su desprendimiento y esplendidez a la hora de rascarse el bolsillo. ¿Y las otras, las penales si las hubiere? Me imagino el desenlace «solos ante los jueces». Así es la vida.