Julián García Candau

Muestras sin valor

Hay que conceder a Ancelotti el beneficio de la duda al alinear en Lyon al Castilla. Hay que adjudicar a Roura el deseo de no romper nada al contar en Múnich con el Barça B. Los dos recurrieron a la cantera. Ambos utilizaron los amistosos de pretemporada, cuando los equipos aún no están rodados, para poner a prueba a jugadores a los que tal vez en el futuro se pueda ascender de categoría.

La ausencia de los participantes en la Copa Confederaciones fue oportunidad para crear ilusión en jugadores que, aunque dentro de nada regresen a su auténtico equipo, llevarles de excursión es premio que no es de fin de curso, sino de principio. Ancelotti y Roura no sacaron conceptos concluyentes porque los equipos que han de dirigir no tienen nada que ver con los puestos en liza. Roura, además, tendrá que limitarse a conversar con Martino, quien solamente pudo ver en televisión el muestrario futbolístico que le ofrecieron. En el Barça no es novedad hacer ostentación de la cantera, aunque alguna vez se le pueda reprochar el desinterés mostrado con algún jugador, como Thiago Alcántara. Todas las joyas azulgrana no pudieron tener idéntica catalogación y no parece que por lo visto haya más de una comparable en valor al propio Thiago. En el Madrid tampoco hubo grandes novedades porque Nacho, Casemiro y Morata eran conocidos. Lo más ilusionante fue Carvajal, que lleva camino de mandar a la suplencia a Arbeloa.

Posdata. Quizá el traspaso de Higuaín no haya sido una buena operación deportiva.