
Tribuna
La economía en el Libro Blanco
Fomentar la innovación y garantizar la Seguridad del continente que requerirá un compromiso firme de los Estados miembros, una estrecha coordinación y una inversión sostenida en las capacidades de Defensa de la UE.

El pasado 12 de marzo, el Parlamento Europeo aprobó el «Libro Blanco sobre el futuro de la defensa europea» que diseña una hoja de ruta para fortalecer las capacidades de Defensa de la Unión Europea, con el horizonte puesto en 2030. Esta resolución recibió un amplio respaldo de los europarlamentarios. Es un documento que aborda las principales estrategias, prioridades, riesgos y amenazas a los que se enfrenta Europa en el contexto de su Defensa y Seguridad. Ofrece un análisis del entorno geopolítico, establece objetivos para reforzar su capacidad defensiva y promueve una mayor cooperación entre los Estados miembros de la UE. El documento se centra en la necesidad de conseguir una Defensa común efectiva y autónoma, capaz de hacer frente a los riesgos y amenazas presentes y futuros. De paso, nos recuerda el artículo 42.7 del Tratado de la Unión, que señala que: «Si un Estado miembro es objeto de una agresión armada en su territorio, los demás Estados miembros le deberán ayuda y asistencia con todos los medios a su alcance, de conformidad con el artículo 51 de la Carta de las Naciones Unidas», lo que compromete a todos los Estados miembros, en los riesgos y amenazas que provienen del Este de Europa. Esta mancomunidad defensiva se entiende sin perjuicio del carácter específico de la política de Seguridad y Defensa de cada uno de los Estados miembros.
Principalmente es un documento estratégico y militar, basado en el momento geopolítico actual, con sus previsiones de futuro dadas las circunstancias presentes, rechazando y condenando la ilegal e injustificada invasión rusa de Ucrania a la que acusa sin ambages de «crimen de agresión» y otros crímenes de guerra, y la hace responsable de la destrucción de Ucrania y, donde EEUU ha decidido dejar de apoyar la Defensa europea, obligando a la UE a liderar la suya propia.
Sin embargo, este documento también aborda diversos aspectos económicos e industriales claves para alcanzar una mayor autonomía estratégica y reforzar la Seguridad del continente. La UE reconoce la necesidad de reducir su dependencia de aliados externos y fortalecer su propia capacidad de Defensa. El Libro Blanco propone medidas concretas para consolidar una industria de Defensa propia y robusta, así como fomentar la cooperación entre los Estados miembros, destacando entre ellas las siguientes:
1.- Aumento de la inversión en Defensa. El documento subraya la importancia de incrementar el gasto en Defensa para abordar la subinversión crónica y mejorar las capacidades militares europeas. Se propone la disposición de recursos financieros significativos para modernizar las Fuerzas Armadas y desarrollar tecnologías avanzadas.
2.- Fortalecimiento de la industria europea de Defensa. Se destaca la necesidad de consolidar una base industrial de Defensa fuerte e innovadora. Se identifican debilidades estructurales, como la fragmentación y la producción insuficiente de sistemas y equipos militares.
3.- Agregación de la demanda, para fomentar la compra conjunta de material militar entre los Estados miembros, para garantizar un flujo constante de pedidos y permitir inversiones en líneas de producción adicionales.
4.- Transformación tecnológica a través de la innovación y desarrollo, invirtiendo en tecnologías emergentes que potencien la superioridad en Defensa, asegurando que la industria europea pueda diseñar, desarrollar y fabricar sus propios productos.
5.- Revisión de la legislación sobre contratación pública en Defensa. El documento aboga por revisar la Directiva 2009/81/CE sobre contratación pública en los ámbitos de Defensa y Seguridad. Se plantea favorecer a las empresas del continente en los procesos de adquisición, fortaleciendo así la industria local.
6. Plan ReArm Europe/Readiness 2030. En paralelo al Libro Blanco, la Comisión Europea presentó el mencionado Plan, un paquete de medidas que proporciona incentivos financieros a los Estados miembros para aumentar la inversión en capacidades de Defensa. Este plan busca responder a la urgencia de apoyar a Ucrania y fortalecer la Seguridad europea a largo plazo.
7.- Creación de instrumentos financieros específicos. Se propone la creación de préstamos y fondos específicos para apoyar proyectos de Defensa conjuntos. Estos mecanismos buscan facilitar la financiación de iniciativas estratégicas y promover la colaboración entre los Estados miembros en el desarrollo de capacidades militares.
8.- Reducción de dependencias externas. El Libro Blanco insiste en la necesidad de reducir la dependencia de la UE de aliados externos en materia de Seguridad y Defensa. Se propone fomentar la autonomía estratégica mediante el fortalecimiento de la industria europea y la inversión en tecnologías clave.
El «Libro Blanco sobre el futuro de la defensa europea» representa un significativo paso hacia una política de Defensa común en la UE, y desde el punto de vista económico, busca fortalecer la base industrial de Defensa europea, fomentar la innovación y garantizar la Seguridad del continente que requerirá un compromiso firme de los Estados miembros, una estrecha coordinación y una inversión sostenida en las capacidades de Defensa de la UE.
Tomás Torres Perales Comandante de Caballería. Academia de las Ciencias y Artes Militares.
✕
Accede a tu cuenta para comentar