Papel

Un órdago de Vox a ninguna parte

Vox puja fuerte en este diabólico juego de naipes en el que se ha convertido la política, convulsionada por intereses cortoplacistas particularísimos. Oficializó ayer su enmienda a la totalidad de los presupuestos andaluces, si bien dejó abierta la puerta a retirarla si el gobierno PP-Cs acepta negociar. Está en su derecho de no prestar gratis sus votos y condicionar las cuentas, pero el órdago y la retórica tremendista abona el terreno a la izquierda. No será fácil explicar el voto junto al PSOE y Podemos en el veto a los Presupuestos.