Sin Perdón

La «fachosfera» de Sánchez

«La aprobación de la ley de amnistía será la consagración de la impunidad y los privilegios para una minoría independentista»

En la izquierda política y mediática quieren acabar con Montesquieu. Al fin y al cabo, es un jurista del siglo XVIII y no lo han leído. Estoy convencido de que algunos creían que era uno de los personajes de «Los tres mosqueteros», «Veinte años después» o «El vizconde de Bragelonne». Los seguidores del Grupo de Puebla en Iberoamérica lo verían más como un pérfido secundario de una telenovela. No recuerdo si sale en las obras completas de Lenin, Stalin o Mao que son las fuentes principales del conocimiento de la izquierda populista y antisistema. Decenas de miles de personas se manifestaron ayer en Madrid en contra de la amnistía, que es el pago de Sánchez a Puigdemont y Junqueras para comprar la presidencia del Gobierno. Montesquieu escribió que «la ley debe ser como la muerte, que no exceptúa a nadie», pero con el sanchismo no es así. Los delincuentes políticos que le apoyan están por encima de la ley. Hay otra frase que es muy adecuada en estas circunstancias: «la libertad es el derecho a hacer lo que las leyes permiten». La aprobación de la proposición de ley de amnistía será la consagración de la impunidad y los privilegios para una minoría independentista.

Es muy positivo que los españoles salgan a la calle para expresar su rechazo a esta indignidad. Sánchez estaba hace unos meses en la «fachosfera», ya que defendía que era inconstitucional. Lo estaba, también, cuando apoyó fervorosamente la aplicación del artículo 155. Era un «fachosfero» total cuando afirmó que lo sucedido había sido una rebelión. A mí no me ofende que digan que formo parte de la «fachosfera» o que un necio del diario gubernamental me llamara catedrático de la «fachosfera». En estos tiempos de escasas lecturas y poca formación, es un honor recibir este tipo de insultos. No sé muy bien qué es la «fachosfera» en el metaverso sanchista. No es más que basurilla propagandística. Lo que conozco razonablemente bien es lo que significa la separación de poderes y el Estado de Derecho. Al igual que otros juristas me asombra que se pretenda acabar con lo que defendieron tanto Montesquieu como los que le precedieron y sucedieron.

Francisco Marhuendaes catedrático de Derecho Público e Historia de las Instituciones (UNIE)