¿El momento de África?

¿Cuál es la situación actual de la Iglesia católica en África?

–La realidad en este continente cambia mucho, no sólo de este a oeste y de norte a sur, sino también dentro de cada país. Hoy en día, el trabajo de la Iglesia católica en África es muy importante en temas de educación, sanidad y servicios sociales, entre otros. No obstante, el gran desafío pasa por mejorar las relaciones con el islam, sobre todo en su vertiente más integrista. Ejemplo de ello es la persecución que sufren muchos católicos en lugares como Egipto, Malí, Libia, etc.

¿Qué retos debe afrontar la religión católica en este continente?

–A pesar de contar con su propia identidad y de los muchos años que lleva establecida la Iglesia católica en África, hay tres desafíos importantes a los que ha de enfrentarse: misión de evangelización, respeto por los derechos humanos y aumento de la participación laica. La labor evangelizadora se enfrenta a una sociedad cosmopolita, multilingüística y multirreligiosa, en la que las relaciones con los musulmanes no son todo lo buenas que podrían ser debido a las facciones fundamentalistas. Respecto a los derechos humanos, la religión católica debe actuar como fuerza de conciencia universal a la hora de subrayar la dignidad de todo ser humano, especialmente la de niños, mujeres y ancianos; debe erigirse como altavoz de la paz, la convivencia y la armonía.

¿Ha llegado la hora de un Papa africano?

–En este momento, no considero que ninguno de los cardenales africanos esté preparado para afrontar el reto. La persona que ocupe la Cátedra de Pedro ha de tener una personalidad y un poder espiritual muy fuertes, y actualmente, no hay un cardenal así en el continente.