Salud

Farmaindustria cuestiona la renovación del convenio por la sostenibilidad del sistema para 2020

Incluir a todos los agentes del sector farmacéutico y no sólo a los innovadores; tener como comparador el PIB nominal del país; y tener en cuenta la inversión del sector en el país son las tres condiciones de la patronal de los laboratorios para revalidar el pacto con el Gobierno

Martín Sellés, presidente de Farmaindustria, esta martes
Martín Sellés, presidente de Farmaindustria, esta marteslarazonE. Corada

“El 21% de toda la inversión de I+d en nuestro país corresponde al sector farmacéutico, esto son unos 1.150 millones de euros anuales. Este alto nivel de inversión requiere mayor reconocimiento por parte de nuestros gobernantes porque, si no lo hay, se irá donde sí la haya y se perderá esa oportunidad”. Así de contundente se ha pronunciado, este martes, Martín Sellés, presidente de Farmaindustria, dejando entrever el malestar de la patronal de los laboratorios farmacéuticos ante las últimas medidas aprobadas por el Ministerio de Sanidad, como el Plan se estimulo de genéricos y biosimilares, según el cual se prima la prescripción por propio activo “relegando la de marca a casos excepcionales”.

Nuestra opinión al respecto es muy negativa porque creemos que es malo para los pacientes y su seguridad, el sistema en general y las compañías innovadoras en especial. Estamos en contra porque parte de un enfoque incorrecto”, dijo. Y para defenderse de lo que considera una agresión la industria sacó pecho a base de datos de todo lo aportado por el sector. “Hay 95 plantas de producción en el territorio nacional que producen por valor de 15.000 millones de euros. Esto representa 25% de toda la alta tecnología que produce y exporta nuestro país por delante de sectores como el aeroespacial, la electrónica y la informática. Estamos comprometidos con los pacientes que sufren y con el desarrollo de nuestro país. Nos gustaría que entendieran que el nuestro es un sector lleno de oportunidades y que o tendrían más aún si se dieran las circunstancias adecuadas -continuó el presidente de Farmaindustria-. Muchos países ya lo saben y hacen lo posible por atraer esas inversiones. Nosotros competimos con ellos y necesitamos argumento sólidos para que vengan a España y no se vayan”.

En cualquier caso, aseguró no estar en contra de los genéricos, pero sí a favor de la libertad de prescripción del médico y de que fármacos innovadores y genéricos puedan competir sin que ninguno tenga privilegios sobre el otro.

Renovación del convenio

No obstante, no hay que perder de vista que el próximo 31 de diciembre vence el convenio de colaboración que Farmaindustria tiene firmado con el Gobierno por la sostenibilidad del sistema. Así, a la pregunta de si éste se renovaría para el año que viene, como viene sucediendo los últimos cuatro años, Sellés hizo referencia a tres condiciones: incluir a todos los agentes del sector farmacéutico no sólo a los innovadores; tener como comparador el PIB nominal del país; y tener en cuenta la inversión del sector en el país.

“Los medicamentos de marca somos responsables del 65% del gasto farmacéutico, del otro 35% lo son los genéricos, los biosimilares... un nuevo convenio tendría que tener esto en cuenta. Ademas, debería tener como comparador el PIB nominal del país y no el real como ahora, y que se tengan en cuenta las aportaciones de estas compañías a las inversiones del país. Consideraciones muy razonables que, si no se tuvieran en cuenta, no tendría sentido un nuevo convenio”, afirmó Sellés quien, pese a todo, afirmó estar “seguro de que habrá diálogo con el Ministerio y de que prevalecerá en entendimiento y acabaremos encontrando las soluciones adecuadas”.

Acceso a la innovación

Por otra parte, y respecto al acceso a la innovación, subrayó que éste está empeorando de forma preocupante. Según el presidente de Farmaindustria los pacientes esperan entre 15 y 20 meses, 450 días esperando de media. “Nos lleva 10 años desarrollarlo y el paciente no puede esperar 1,5 años. El proceso desde que lo aprueba la EMA hasta que está disponible en España se tiene que acortar y nosotros dispuestos a colaborar.

Por último pidió dedicar un 7% del PIB para garantizar la calidad asistencial tras lamentar que el gasto publico en medicamentos en 2018 estuvo al nivel de 2009 y “haya subido tan sólo un 2% en una década”.