Sanidad

Dimite el segundo alto cargo en el Ministerio de Sanidad desde el estallido de la pandemia

El director general de Recursos Humanos deja el puesto dos días después de la huelga de médicos en toda España. Su marcha se suma a la “fuga” del número dos de Illa el pasado verano

El Ministerio de Sanidad ha perdido a su segundo alto cargo desde que estalló la pandemia de Covid-19. En verano abandonó el departamento que dirige Salvador Illa su número dos, el secretario general de Sanidad, Faustino Blanco, y ahora lo acaba de hacer el director general de Recursos Humanos, Rodrigo Gutiérrez.

Fuentes no oficiales del Ministerio de Sanidad aseguran a LA RAZÓN que Gutiérrez ha sido “invitado” a marcharse tras la huelga que protagonizaron los médicos el pasado martes 27 en toda España contra un decreto cuyo padre ideológico ha sido el propio director general de Recursos Humanos.

La norma contra la que han protestado los facultativos en todos los hospitales y centros de salud abre la puerta, por ejemplo, al ejercicio profesional como especialistas por parte de médicos que no lo son, y a que muchos especialistas tengan que ejercer en especialidades ajenas a su formación.

“Militarización”sanitaria

Se trata, como denunciaron varios médicos a este periódico, de un proceso de “militarización” sanitaria con la excusa de la pandemia de Covid-19, que hace estallar por los aires el ejemplar sistema de formación de facultativos en España y que repercutirá en un deterioro del ejercicio profesional y de la calidad asistencial que reciben los pacientes.

Tomás Toranzo, presidente de la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM), la organización convocante de la huelga, asegura a LA RAZÓN que la labor de Rodrigo Gutiérrez en la Dirección General ha sido “un desastre”, y que la situación de los recursos humanos en materia sanitaria es actualmente un caos.

Desde que estalló la crisis del coronavirus, a Gutiérrez se le atribuyen fallos de todo tipo que han puesto en contra del Ministerio y de Salvador Illa no sólo a los médicos, sino también a la enfermería y a otros colectivos profesionales de la Sanidad. Además de este polémico decreto, otro de sus fallos más clamorosos fue su empecinamiento a la hora de imponer una elección telemática de plaza a los licenciados en medicina que habían aprobado el examen MIR, desatando un caos sin precedentes y protestas de todo tipo.

El hastag #Rogufedimision llegó incluso a ser trending topic en Twitter. Finalmente, el Tribunal Supremo tumbó las pretensiones de Gutiérrez y la elección pudo hacerse telemática. El retraso en el proceso ha hecho que los MIR que pudieron seleccionar puesto en el que formarse se incorporaran con meses de retraso a su plaza, justo en plena expansión de los contagios por coronavirus.

Su área tampoco ha sido capaz de coordinar medidas a nivel nacional para mejorar las condiciones de trabajo de los MIR, que han protestado en toda España. Este colectivo permanecía sumido en la incertidumbre por la fecha de la celebración del examen para el nuevo curso. En principio, iba a hacerse en mayo, pero las últimas informaciones indican que podría adelantarse a febrero.