Tensión alta

Este es el primer hábito que debes abandonar si tienes la presión arterial alta

Si sufres de problemas de hipertensión, dejar de consumir sal, no es una de las costumbres principales que debes controlar para mejorar tu calidad de vida

Dieta DASH: qué es y cómo puede controlar la hipertensión
Dieta DASH: qué es y cómo puede controlar la hipertensiónDreamstimeDreamstime

Para aquellos que estén buscando maneras de manejar la hipertensión, se suelen encontrar con que tienen que eliminar el consumo excesivo de sal de su dieta. Sin embargo, hay otros hábitos que son aún más importantes que también pueden ayudar a controlar la presión arterial alta.

¿Qué es la presión arterial y por qué es importante?

La presión arterial se mide por la fuerza con la que la sangre fluye a través de las arterias. Cuando esta presión es demasiado alta, se ejerce un estrés continuo en las paredes de las arterias, lo que puede dañarlas con el tiempo y aumentar el riesgo de problemas cardíacos y accidentes cerebrovasculares como derrames cerebrales u otras enfermedades cardiovasculares.

Los niveles de presión arterial se expresan en dos números: el primero (sistólica) indica la fuerza de la sangre al ser bombeada desde el corazón hacia el cuerpo, mientras que el segundo (diastólica) mide la presión entre latidos, cuando el corazón está en reposo. Una presión arterial saludable se sitúa por debajo de 120/80 mm Hg, y cualquier valor superior a 130/80 ya se considera elevado.

El hábito que deberías dejar de hacer si tienes hipertensión

El principal hábito que debes dejar de hacer para reducir la hipertensión es reducir los alimentos con alto contenido en sodio y grasas saturadas, especialmente los que se encuentran en algunos productos ultra-procesados y en ocasiones, en comidas de restaurante. Aunque no todos los alimentos procesados son perjudiciales, ciertos productos ultra-procesados, como las patatas fritas, las galletas, los refrescos y los productos horneados envasados, contienen niveles elevados de sodio, azúcares añadidos y grasas que pueden contribuir a un aumento en la presión arterial.

Según el Dr. David Katz, experto en medicina preventiva, estos alimentos ultra-procesados contienen aditivos como colorantes, saborizantes y conservantes que aumentan su vida útil, pero también pueden afectar negativamente la salud cardiovascular.

Diversos estudios vinculan el consumo de estos productos con un aumento en los casos de hipertensión. En EE.UU., más de la mitad de las calorías diarias provienen de alimentos ultra-procesados, lo que incrementa la ingesta de sodio, uno de los principales factores que influye en la presión arterial. Además, estos productos suelen desplazar a opciones secundarias alimentos más saludables, como frutas y verduras frescas, de la dieta cotidiana.

Estrategias para reducir la presión arterial

  • Cocina más en casa: Preparar tus propias comidas ayuda a controlar la cantidad de sodio, grasas y azúcares que consumes. Estudios muestran que quienes comen fuera frecuentemente tienden a ingerir niveles de sodio más altos, así que optar por opciones caseras puede ser un gran cambio.
  • Mantente activo: El ejercicio es esencial para regular la presión arterial. No hace falta que sea un entrenamiento intenso, con hacer actividades como caminar, andar en bicicleta o incluso subir escaleras en lugar de usar el ascensor, ayudarán a regular la presión arterial.
  • Controla el estrés: El estrés crónico puede elevar los niveles de presión arterial. Realizar actividades relajantes como disfrutar de una taza de té, practicar respiración profunda o dedicar unos minutos a tus aficiones puede ayudarte a mantener la presión bajo control.