Coronavirus

Doctor López-Goñi: “Esta pandemia la esperábamos desde hace tiempo”

El Catedrático de microbiología en la Universidad de Navarra quier transmitir que la ciencia va a estar a la altura y que esta batalla la vamos a ganar

El doctor Ignacio López-Goñi (Pamplona, 1962) se ha convertido estos días en el portador de buenas noticias. Concretamente, de diez. La lista que publicó hace unos días sobre la decena de cosas positivas que deberíamos saber sobre el coronavirus se ha convertido, valga la redundancia, en viral. En el momento en que se hizo esta entrevista ya la habían leído más de seis millones de internautas y estaba traducida a varios idiomas. Pero este catedrático no quiere quitar hierro al asunto, sabe que estamos solo al principio y que los casos de infectados pueden ser la punta del iceberg. Sin embargo, quiere transmitirnos que la ciencia va a estar a la altura y que esta batalla la vamos a ganar.

-¿Conocemos a ciencia cierta el origen del virus?

-Ya hay cientos de genomas secuenciados, lo que nos indica que se generó entre finales de octubre y principios de noviembre. A partir de ahí se fue extendiendo. El origen es natural y está muy relacionado con coronavirus de murciélagos. Probablemente ese sea su origen y se haya acabado adaptando al ser humano a través de una especie intermedia, como en otros casos.

-¿Qué especie puede ser esa?

-Aún no lo sabemos, se ha hablado de las civetas pero aún hay dudas. En el caso del SARS fue así y en el del MERS fue de murciélago a dromedario y de dromedario a humano.

-¿El SIDA tuvo un origen similar? ¿En qué se parecen?

-Son virus que se denominan zonóticos, que están en los animales y en un determinado momento pasan al ser humano y se adaptan. Incluso la gripe, que tiene un origen aviar. Esto es relativamente frecuente y se calcula que el 70 por ciento de estos nuevos virus tienen su origen en los animales.

-¿Existe alguna relación entre el surgimiento de la pandemia y la forma en que tratamos al medioambiente?

-Con otros virus quizá sí porque los cambios de temperatura y humedad pueden afectar a la distribución de algunos de ellos que se transmiten a través de animales como los roedores. El caso más evidente es el de los mosquitos y garrapatas que transmiten virus como el zika o el dengue y cuya ubicación sí puede cambiar por el cambio climático. También sucede que entramos en contacto con animales con los que antes no lo hacíamos por alteraciones de los escosistemas.

-¿Qué ha pasado esta vez para que se haya producido una pandemia?

-Es algo que se esperaba desde hace años, un virus pandémico, respiratorio y para el que no tenemos inmunidad. Sabíamos que iba a llegar porque ya ha ocurrido a lo largo de la historia. Desde la irrupción en 1918 del virus de la gripe hemos tenido varias falsas alarmas, como el SARS o el MERS. Los coronavirus ya estaban en la lista de la Organización Mundial de la Salud (OMS) como algo que había que vigilar. Era esperable.

-¿Por qué ahora?

-Podemos añadir un factor que antes no había: la globalización. Para un virus lo mejor es mucha gente, muy junta y todos moviéndose.

-¿La llamada gripe A fue una llamada de atención?

-Creo que sí, ha habido pequeñas alertas. El de la gripe A de 2009 era un virus nuevo con alta transmisibilidad pero que al final tuvo una mortalidad baja, como la de la gripe estacional.

-¿Hemos llegado tarde?

-Esa es una decisión muy difícil, valorar riesgo-beneficio. Además no sabes cuál es el momento adecuado porque desconoces en qué punto de la curva te encuentras.

-¿Dónde cree usted que nos encontramos ahora?

-No sabemos si estamos en el inicio o muy arriba, pero cuando uno compara las curvas de los distintos países europeos con lo que está pasando en Italia vamos con unas semanas de retraso, pero al mismo ritmo. Así que cuanto más eficaces seamos en adoptar esas medidas de contención del virus, mejor. Así conseguiremos evitar llegar al pico de la epidemia. Si llegas ahí es cuando se satura el sistema sanitario. Hay que evitarlo a toda costa. El objetivo no es que se infecte menos gente, sino que no se contagie toda al mismo tiempo. Hay que blindar al personal sanitario.

-¿Cuál es la explicación médica de que afecte más a los mayores?

-Ocurre en general con todas las neumonías. Además, se ha visto que este virus puede producir también algunas alteraciones cardiovasculares. Es frecuente también que cuando tienes otras afecciones todo se complique porque te afecta al sistema inmune, a tus defensas. Cuando estás sano son tus defensas las que luchan contra el virus y lo acabas bloqueando. Pero cuando hay otras patologías puedes perder la batalla.

-¿Por eso los niños no parecen infectarse?

-No sabemos aún por qué, aunque hay distintas teorías. Una podría ser que este virus necesite un sistema inmune más maduro para desarrollarse.

-¿Por qué cuesta tanto la obtención de una vacuna?

-Una vacuna normal puede tardar años, pero en condiciones de emergencia sanitaria se pueden agilizar los plazos. La buena noticia es que tenemos prototipos de vacunas porque había gente que ya estaba trabajando en ello. Hay al menos ocho de ellos que están a punto de entrar en la fase clínica. Luego hay que ensayarla, coger voluntarios y ver si tiene efectos tóxicos o secundarios. Eso puede durar meses, pero hay que tener en cuenta que las vacunas son siempre preventivas, para lo próximo que nos venga.

-¿Qué no hemos hecho bien que ahora sí se puede corregir de cara al futuro?

-Invertir en ciencia. Me hace mucha gracia que ahora todo el mundo esté mirando a los científicos para ver cuándo llega la vacuna. ¿Y todos los años que nos han tenido estrangulados? La sociedad se tiene que dar cuenta de esto, no solo los políticos. Ellos hacen lo que la sociedad demanda. Este virus pasará, pero vendrá otro. Al final la solución tiene que venir de la ciencia. Y no te puedes olvidar de ella cuando todo va bien.

-¿Cree que exagera Angela Merkel cuando dice que se va a infectar el 80% de los alemanes?

-Tendremos que ir viéndolo. Probablemente lo que estamos viendo es solo la punta del iceberg. Hay que pensar en cortar la transmisión por ese 5% que puede llegar a morir.

-¿Cuál es el mayor bulo que le gustaría desmentir?

-Diría que no es solo un catarro fuerte ni algo que nos va a matar a todos. Ni una cosa ni la otra.

-¿Es cierto que hay gente más joven muy afectada?

-La frecuencia está claro que es menor, pero ¿y si un joven tiene diabetes? ¿O está trasplantado? Todos somos susceptibles, aunque la mortalidad sea baja. No es solo una cuestión de edad.

-¿El virus es el mismo desde el principio?

-Los virus viven mutando, lo hacen constantemente. De hecho, los virólogos hablamos de poblaciones de virus, no de uno solo. Son un conjunto de mutantes que se van adaptando a alta velocidad. ¿Qué pasará en el futuro? No lo sabemos. Lo que suele pasar a veces es que cuando el virus pasa a otra especie al principio es muy virulento porque no es su hospedador natural y con el tiempo se adapta y pierde virulencia. Al virus lo que le interesa, si lo podemos decir así, no es matar a su hospedador sino seguir transmitiéndose.

-¿Es cierto que te puedes infectar dos veces? Se oyen historias de gente que lo pasa y luego vuelve a dar positivo.

-Sí. Hay algunos datos que hablan de gente que ha vuelto al cabo de unos días y da positivo de nuevo. Esto es un gran problema para el control de una epidemia y aún no sabemos el motivo. Puede ser que se haya infectado con otro virus o que la persona no genere inmunidad o que el test haya fallado.

-¿Esto es nuevo?

-No, hay virus que pasas solo una vez en la vida, como el sarampión, y otros como la gripe que los puedes tener todos los años.