Alimentación

Cárcel para los padres veganos que impongan su dieta

Italia estudiará una propuesta que plantea penas de uno a seis años para los progenitores que obliguen a sus hijos a esta alimentación

Cárcel para los padres veganos que impongan su dieta
Cárcel para los padres veganos que impongan su dietalarazon

Italia estudiará una propuesta que plantea penas de uno a seis años para los progenitores que obliguen a sus hijos a esta alimentación

Viendo los debates televisivos italianos, la cuestión de las dietas vegetarianas, pero sobre todo las veganas, se ha vuelto un argumento recurrente. Cuando parece que no hay controversias políticas sobre las que discutir, o incluso cuando éstas han colapsado por completo la programación audiovisual transalpina, se vuelve a tocar el tema: carnívoros versus veganos y viceversa, desplazando el debate entre tolerantes e intolerantes... a la alimentación del otro. A falta de creencias cívicas, políticas o religiosas, para muchos la comida se convierte en una ideología más. Todo se complica, además, cuando la cuestión enriquece las crónicas de sucesos italianas, como las de hace unas semanas, cuando se llegaba a conocer que a una pareja de Milán se le quitaba la custodia de su hijo de un año por pesar como uno de tres meses, tras una muy estricta dieta vegana.

La pregunta no está exenta de controversia: ¿se puede obligar a unos padres a alimentar de una forma concreta a sus hijos? La parlamentaria italiana Elvira Savino, miembro de la Cámara de los Diputados transalpina del partido Forza Italia –el de Silvio Berlusconi–, ha registrado en la Cámara Baja una propuesta de ley que persiga penalmente a quienes impongan una dieta sin elementos esenciales para el crecimiento sano y equilibrado de un menor de 16 años. La finalidad de esta propuesta, según quienes las defienden, es la de contrastar los excesos «ideológicos» vinculados a la dieta vegana.

Ya ha habido precedentes, aunque no tan restrictivos. En Francia, en 2011, una pareja vegana fue condenada a cinco años de prisión por la muerte de su hija, de 11 años. La Justicia estimó que el bebé «heredó» un déficit alimentario de la madre a través de la leche materna. En 2013, en Holanda, la Justicia intentó quitarle la custodia a la madre de un adolescente de 15 años por someterle al crudiveganismo. Es decir, veganismo –no se ingiere ningún alimento que proceda de un animal–, pero con los alimentos sin cocinar.

Savino explica que su intención es la de proteger a los menores impidiendo a los padres «radicalizados» que impongan a los hijos una alimentación demasiado limitada, que no contenga los elementos nutritivos esenciales para un crecimiento correcto tanto desde un punto de vista físico como cognitivo: «Desde hace una década se ha difundido la idea de que una dieta vegetariana o vegana aporta grandes beneficios a la salud del individuo», explica la diputada en el documento. «El problema surge cuando están involucrados los menores. Muchas veces, y sobre todo a los hijos de padres que siguen dietas vegetarianas o veganas, se les obliga a seguir una alimentación que excluye categórica e imprudentemente alimentos de origen animal y sus derivados».

Savino ofrece argumentos: «Para los niños y los adolescentes, la alimentación vegana carece de zinc, hierro, vitamina D, vitamina B12 y omega 3». Así, la diputada afirma que su propuesta de ley apunta a «estigmatizar definitivamente las conductas alimentarias imprudentes y peligrosas impuestas por los padres contra los menores».

La pena sería de un año de cárcel para la mayoría de los casos. Pero si la cosa se complicara, como, por ejemplo, en el caso de «una enfermedad o una lesión permanente, la pena de cárcel podría aumentar» de dos a cuatro años. Si se provocara la muerte, «la pena será de los cuatro a los seis años». Según la propuesta, las penas podrían aumentar de 12 meses si las «conductas sancionadas se hayan aplicado a menores de 3 años». El periódico «Corriere della Sera» hace una suposición: «Un padre que aplique una dieta vegana a su hijo menor de tres años arriesgaría, en la mejor de las hipótesis, hasta dos años de cárcel».

Andrea Ghiselli, presidente de la Sociedad Italiana de Ciencias de la Alimentación, ha dado su opinión. «Ante la creencia de que una dieta sin productos animales sea más saludable, no hay ninguna prueba que confirme que una dieta vegana sea mejor que una omnívora. Es más, hay más de una prueba que indica que la dieta vegana implique tener más carencias alimenticias», afirmó a «La Repubblica».

Los que apoyan esta dieta critican los hábitos alimenticios de los países occidentales, donde se abusa de azúcares y grasas. «En Occidente se consume tal cantidad de productos animales que puede provocar problemas de salud, más de los que generaría una dieta vegana», explica Andrea Ghiselli. Y añade: «La solución no está, por tanto, en la eliminación de los productos animales, sino en consumir la cantidad justa».

Con todo, una dieta vegana no es imposible de seguir, «siempre que se planifiquen de forma oportuna y siendo controladas por un experto, no por un padre o una madre con acceso a internet». Así, «para un organismo en crecimiento, como el de un niño, la cuestión es delicada. Aunque una dieta vegana bien planificada podría ser idónea para cualquier edad, en la práctica puede comportar problemas». Para los niños, según Ghiselli, lo ideal sería un equilibrio entre los productos vegetales y los productos animales, ya que esto es lo mejor para la salud: «Tenemos que consumir una menor cantidad de carne. Lo cual no significa eliminarla de nuestro día a día, ya que se puede sustituir con alternativas vegetales como las legumbres».