Investigación Médica
«Daywake», el gen que suprime la siesta
Descubierto por investigadores estadounidenses en las moscas de la fruta, será clave para estudiar cómo equilibrar los beneficios de una buena siesta con los de realizar actividades durante el día
Investigadores de la Universidad de Rutgers, en Nueva Jersey, Estados Unidos, han identificado un gen supresor de la siesta en las moscas de la fruta, que arroja luz sobre la biología que ayuda a muchas criaturas, incluidos los humanos, a equilibrar los beneficios de una buena siesta con los de realizar actividades importantes durante el día, informa Europa Press.
Según su estudio, publicado en la revista ‘Current Biology’, muchos animales se echan siestas, que son más intensas en los días cálidos, probablemente una protección desarrollada contra la exposición al sol del mediodía. En los seres humanos, las siestas cortas ayudan con la memoria y el aprendizaje, pero demasiado sueño durante el día está vinculado con la diabetes, el Parkinson y otras enfermedades.
Los investigadores del Centro de Biotecnología y Medicina de Rutgers encontraron un gen en las moscas de ‘Drosophila’ que, cuando las temperaturas son bajas, se activan para suprimir la tendencia de las moscas a echar una siesta durante el día, probablemente para que puedan pasar más tiempo buscando comida o compañeros. Los investigadores llamaron al gen «daywake».
«Este gen contribuye a la flexibilidad de comportamiento, o la capacidad de esconderse del sol del mediodía cuando hace calor, pero participar en actividades buenas para sobrevivir cuando hace frío. Eso probablemente ayudó a estas moscas a expandirse más allá de su hogar ancestral en el África ecuatorial para colonizar con éxito zonas templadas de todo el mundo», argumenta el coautor Isaac Edery, profesor en el centro Rutgers. ‘Daywake’ se encuentra adyacente y se superpone ligeramente a un gen previamente documentado, llamado «periodo», que regula el reloj circadiano de las moscas y rige los ciclos diarios de vigilia-sueño. Los científicos descubrieron que la actividad de este ‘daywake’ aumenta con una secuencia específica dentro del gen ‘periodo’, y que este proceso ocurre de manera más eficiente cuando las moscas están expuestas a temperaturas frías. Este proceso, y la actividad de supresión de la siesta de ‘daywake’, no afecta al sueño nocturno de las moscas. «Aunque el gen ‘daywake’ no está presente en los humanos, nuestro hallazgo refuerza la idea de que el sueño nocturno y la siesta diurna están gobernados por mecanismos distintos y cumplen funciones separadas para la salud y la supervivencia», afirma Edery. El descubrimiento de que las actividades de una secuencia en un gen pueden desencadenar la acción de un gen cercano es en sí mismo un hallazgo novedoso que promete revelar nuevos mecanismos reguladores de genes en moscas y otros organismos, dice Emery. EP
✕
Accede a tu cuenta para comentar