Estreno

Quien canta su mal espanta

Netflix presenta «Crazy Ex-girlfriend», una comedia donde la protagonista, adicta al trabajo, olvida sus preocupaciones montando números musicales.

Rebecca (dcha.), interpretada por Rachel Bloom, y Santino Fontana en el papel de Greg (izqda.)
Rebecca (dcha.), interpretada por Rachel Bloom, y Santino Fontana en el papel de Greg (izqda.)larazon

Netflix presenta «Crazy Ex-girlfriend», una comedia donde la protagonista, adicta al trabajo, olvida sus preocupaciones montando números musicales.

No cabe duda de que comienza una época de esplendor para los musicales. Ayer nos enterábamos del éxito rotundo que ha tenido «La la land». La última película de Damien Chazelle, de este género, ha sido la merecedora de hasta siete nominaciones de cara a la próxima ceremonia de los Globos de Oro, consolidándose así como la favorita. En esta línea, otra ficción de estas características, pero en esta ocasión en forma de serie, llega a nuestro país. De la mano de la plataforma de vídeo bajo demanda Netflix, podremos disfrutar de la primera temporada de «Crazy Ex-girlfriend», encontrándose de forma íntegra en su catálogo desde el día 15 de este mes.

Centrarse en el trabajo cuando la vida va de mal en peor puede que sea buena idea. Pero cuando esta vía de escape se convierte en una obsesión y la totalidad de la existencia se basa en fichar por la mañanas y luchar por un ascenso, es posible que sea hora de echar el freno. Rebecca Nora Bunch (Rachel Bloom), la protagonista de la serie, da buena fe de ello. Tras sufrir una crisis nerviosa causada por esta adicción al trabajo, Rebecca decide abandonar su estresante puesto como abogada en Nueva York y trasladarse a la pequeña población de West Covina, en California, para tratar de encontrar una vida más tranquila y, de paso, a su ex novio Josh, con el que tuvo un breve romance en un campamento de verano hace más de diez años.

Quizá, hasta ahí, la serie de The CW no sea nada nuevo. Y es que el punto discordante que aporta la ficción no es otro que la manera que tienen Rebecca y su entorno de aliviar los males: cantando y montando números musicales que no desentonarían en Broadway. De este modo, la producción norteamericana ofrece su particular visión de los estereotipos, el mundo moderno y el difícil papel que tiene la mujer en el mismo.

La ficción, creada por la propia Bloom, en colaboración con Aline Brosh McKenna, Vio la luz en Estados Unidos el año pasado. Cuando sus bajos índices de audiencia auguraban lo peor, dio la gran sorpresa, siendo objeto de las alabanzas de la crítica internacional, que sirvió como pretexto para otorgar el Globo de Oro a la Mejor Actriz de Serie Musical de Comedia a Bloom y su equivalente en los Critic’s Choice Awards, entre otras nominaciones. Ahora la serie emite de su segunda temporada en el país norteamericano y, aunque seguirá en el aire hasta febrero, ya le ha valido a la actriz principal para llevarse una nueva nominación para los premios que otorga la Asociación de la Prensa Extranjera de Hollywood.