Los peores de PISA piden paralizar la Lomce

El Ministerio responde que no se hará, y que las regiones tienen sólo la competencia de las asignaturasde libre configuración

Los consejeros autonómicos de Educación del PSOE pidieron ayer la «paralización inmediata» de la implantación de la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (Lomce) en las enseñanzas de ESO , Primaria y Bachillerato, que empiezan en el mes de septiembre. Así lo explicaron ayer el secretario federal de Educación del PSOE, José Miguel Pérez, y el responsable de Educación, Ciencia y Cultura del equipo de expertos del PSOE, Ángel Gabilondo, tras reunirse con los consejeros de Educación de Baleares, Aragón, Castilla-La Mancha, Cantabria, Andalucía y Extremadura.

La explicación que dieron para reclamar esta moratoria es «la ausencia de homogeneidad» que está imperando en la entrada en vigor de la ley que hace esencial abrir una vía de diálogo respecto a la reforma educativa, sobre todo en cuanto a las pruebas de valoración externas, conocidas como reválidas, y sobre el propio desarrollo curricular que debe entrar en vigor el curso académico que viene.

«Va a haber acción social, política y pública para solicitar la paralización del calendario de aplicación de la Lomce, porque es responsable hacerlo... Se trata de acabar con toda esa inseguridad», afirmaron en Ferraz tras la reunión. A lo que Ángel Gabilondo puntualizó que la demanda del partido socialista se hará desde el cumplimiento de la ley, garantizando la estabilidad y la certidumbre. Por ello, desde el PSOE se solicitó que el ministro de Educación, Cultura y Deportes, Íñigo Méndez de Vigo, convoque con carácter de urgencia –para este mismo mes– la Conferencia sectorial para decidir entre todos qué ocurrirá el curso que viene.

Algo que desde el Ministerio de Educación tienen más que claro: «La Lomce, a pesar del cambio de titular de la cartera, no se paraliza», aseveraron a este periódico fuentes del Ministerio de Educación.

«El ministro se está reuniendo individualmente con todas las comunidades autónomas para dialogar con ellos. En cualquier caso, las asignaturas troncales no se tocan, sólo tienen margen de maniobra en las asignaturas de libre configuración que es competencia de las comunidades autónomas», añadieron.

Pero hay algo clave que obviaron en Ferraz. La reforma de la Lomce, según los expertos en educación consultados en su día, permitirá escalar posiciones en PISA con herramientas como las evaluaciones externas, o si no al menos existe esa posibilidad al no quedarse con el mismo desarrollo curricular que daba estos malos resultados, de ahí que cuando salieron las «notas» del último informe PISA, Luis Peral, senador del PP de Educación explicase que justificaban dicha reforma. Pero es que, curiosamente, las comunidades autónomas gobernadas por el PSOE que piden la paralización de la reforma educativa son, precisamente, de las regiones que peores resultados obtuvieron en dicho informe, aunque con alguna que otra excepción.

Dicho examen trianual recababa datos de 14 comunidades autónomas, y evaluaba el nivel de conocimiento de los estudiantes en Matemáticas, Lectura y Ciencias. Pues bien, dejando aparte a Castilla-La Mancha (puesto que no participó en las pruebas), de las cinco autonomías que piden la paralización inmediata de la Lomce, tres regiones están peor que la media nacional en Matemáticas, cuatro están por debajo de los niveles alcanzados de media en Lectura y otras tres comunidades están peor que el resto del país en Ciencias. Y todo ello, a pesar de que los alumnos españoles de 15 años están a la cola de los países de la OCDE al estar, de 34 países, en la posición número 25 en Matemáticas, 23 en Lectura y 21 en Ciencias. Es decir, con una nota media ya de por sí preocupante que avalaba la reforma educativa.

En el vagón de cola

En concreto, Extremadura sacó únicamente 461 puntos en Matemáticas, lo que le situó como la región con peores resultados en esta asignatura, muy por debajo de la media nacional (484 puntos) y muy alejada del promedio de la OCDE (494) y del de la UE (489), así como de otras regiones como Navarra, Castilla y León y País Vasco, con 517, 509 y 505 puntos. También fue la que peor nota obtuvo en Lectura, con 457 puntos; es decir, 31 puntos por debajo de la media nacional y 54 puntos por detrás que Madrid, que obtuvo el mejor resultado en esta materia. En cuanto a Ciencias, Extremadura se situó en la segunda peor posición, con 483 puntos, sólo cuatro mejor que Murcia y 13 peor que la media nacional en esta materia.

En el caso de las Islas Baleares, la comunidad obtuvo la cuarta peor nota en Matemáticas y la tercera peor en Lectura y en Ciencias, situándose en todas las materias examinadas por debajo de la media nacional, ya de por sí baja.

Respecto a Andalucía, la consejera de Educación del PSOE, Adelaida de la Calle, ha dejado clara la posición de la Junta frente a la Lomce interponiendo recursos ante el Tribunal Constitucional y el Supremo y trabajando «para paliar los efectos de la ley sin incurrir en insumisión». Pero De la Calle debería recordar que los alumnos de Andalucía obtuvieron unos malos resultados en PISA al situarse los terceros peores en Matemáticas y los cuartos del vagón de cola en Lectura y Ciencias, por detrás de la media nacional.

En el caso de Aragón y Cantabria, los resultados que obtuvieron fueron óptimos, aunque tampoco para echar cohetes. Así, se situaron por encima de la media española en Matemáticas y en Ciencias, aunque alejados de los resultados obtenidos en estas materias por los alumnos de Navarra y Castilla y León. En el caso de Lectura, los estudiantes de Aragón obtuvieron cinco puntos más que la media nacional, pero, en cambio, los alumnos de Cantabria estaban tres puntos por debajo de la media.

En definitiva, los resultados obtenidos por estas regiones que piden la eliminación de la Lomce y, en general, por todas las comunidades autónomas justificaban una reforma educativa, que si bien puede entenderse que se pida un cambio si hay consenso, no parece muy coherente pedirlo cuando restan pocos meses para que entre en vigor en los cursos pares (2, 4 y 6) de educación Primaria, así como en los impares de la ESO (1 y 3) y Bachillerato.