El otoño llega para quedarse: bajadas de las temperaturas de hasta 14 grados

El causante es un sistema frontal activo asociado a una borrasca situada en las Islas Británicas y Golfo de Vizcaya y a un segundo centro de bajas presiones que afectará al área cantábrica.

El descenso brusco de temperaturas, de hasta 14 grados, y las lluvias y tormentas que a partir de mañana afectarán a toda la península anuncian "la inminente llegada del otoño"y que el termómetro "no recuperará ya los valores actuales". Modesto Sánchez, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), ha explicado a Efe que, aunque hoy todavía "parece que es verano", esta noche será ya mucho más fresca en toda la península y el descenso térmico a partir de mañana será "importantísimo".

Así, se prevé un "bajonazo"de entre 8 y 10 grados el martes, no tan acusado el miércoles y algo más en las mínimas el jueves, en que el descenso se frena "pero nos coloca ya sí con temperaturas otoñales, en línea a lo que corresponde para esta época del año". No obstante, el viernes podría iniciarse un "ligero repunte de las temperaturas de un par de grados, que apenas se notará", ha apuntado el portavoz de la Aemet, quien ha pronosticado que los termómetros "no volverán ya"a marcar los valores actuales.

El causante de este episodio de inestabilidad es un sistema frontal activo asociado a una borrasca situada en el entorno de las Islas Británicas y Golfo de Vizcaya y a un segundo centro de bajas presiones que afectará a partir del miércoles al área cantábrica.

El primer frente vendrá acompañado de una masa de aire frío de origen atlántico que comenzará a afectar el martes a la península desde el noroeste y se irá desplazando hacia el resto de zonas, mientras que la segunda borrasca afectará principalmente al tercio norte, informa la Aemet. Lo más significativo será el descenso térmico, notable o incluso extraordinario en la mayor parte de la Península, que comenzará por el oeste y centro de la península y se irá extendiendo hacia el tercio oriental y Baleares el miércoles.

Así, mañana las máximas no pasarán de los 30 grados o en algún caso superarán este nivel en uno o dos grados, y las mínimas se quedarán entre 7 y 8 en puntos de Castilla y León, con valores de cero grados en la montaña, ha adelantado el portavoz.

En esta comunidad, en Extremadura y en Andalucía el descenso podría ser de hasta 12 o 14 grados, mientras que el resto de la península y Baleares marcarán entre 8 y 10 grados menos.

Además, el martes se esperan chubascos generalizados que podrían ser localmente persistentes y acompañados de tormentas fuertes en Galicia, área Cantábrica, norte de Castilla y León, Aragón, Cataluña y entorno de los Sistemas Central e Ibérico.

Las precipitaciones podrían ser muy fuertes de manera puntual en el País Vasco, Navarra, y norte de Aragón y Cataluña y afectarán con menor intensidad a otras zonas del oeste y norte de la península y a Baleares. Tras el paso del frente, se producirá una disminución de las precipitaciones en el sur peninsular con apertura de claros a partir de la tarde del martes, aunque se mantendrá cierta inestabilidad en la zona centro y mitad norte durante el miércoles y el jueves.

Y es que "mañana es el día de las lluvias y de bajada de las temperaturas, con lo que la sensación va a ser claramente de otoño", ha señalado Modesto Sánchez.

De hecho, la Aemet ha decretado aviso amarillo por lluvias y tormentas en el oeste de Galicia, oeste de Castilla y León, Extremadura y Andalucía occidental, así como en puntos de Navarra, Aragón, Cataluña y norte de la Comunidad Valenciana. A partir del viernes, las lluvias afectarán principalmente a Galicia y área cantábrica y serán menos probables cuanto más al sur, anuncia Eltiempo.es en una nota, mientras que en Canarias se espera precipitaciones al norte de las islas de mayor relieve.

Ese día las temperaturas empezarán a subir para quedar el fin de semana "en los valores normales para la época del año", señala la nota, con lluvias más probables en el norte de Galicia, área cantábrica, Cataluña, Baleares y norte de las islas Canarias de mayor relieve.

Efe