Comunidad de Madrid
Fundación Madrina, premiada por su labor de voluntariado
Con el lema «Cambia el mundo. ¡Hazte voluntario!» Naciones Unidas estableció que el 5 de diciembre, Día Internacional de los Voluntarios 2014, sirviera para reconocer la labor y compromiso de los voluntarios, así como de las organizaciones de las que forman parte. A su vez, constituye una oportunidad para informar a la gente sobre el impacto del voluntariado en la paz y el desarrollo sostenible.
La Comunidad de Madrid se unió a la conmemoración del Día Internacional de los Voluntarios en 2014 con un reconocimiento público y agradecimiento a los voluntarios de la región, así como a las más de 1.100 organizaciones de voluntariado que tanto aportan a nuestra sociedad para mejorar las condiciones de vida y la libertad de las personas. Este año fueron homenajeadas doce entidades que representan la labor voluntaria que está presente en nuestra región, definidos todos ellos por su carácter solidario y responsable, aportando su tiempo y su esfuerzo. Doce organizaciones e instituciones que permiten que tantos madrileños puedan colaborar con su solidaridad y enriquecer así su vida personal y profesional a través de actividades de voluntariado.
Una de ellas fue Fundación Madrina, en la persona de Blanca Uriarte, que, como «madrina», ha dedicado más de 9 años a apoyar, acompañar y enseñar a ser madres a jóvenes que ingresan en los pisos de acogida de esta entidad.
El acto, dirigido por Anne Igartiburu, estuvo presidido por el viceconsejero de Familia y Asuntos Sociales Carlos Izquierdo y la directora general de Voluntariado de la Comunidad de Madrid, Ana Isabel Martín. El evento se cerró con una representación de danza coreografiada por la Escuela Nacional.
La Fundación Madrina: «Un niño, una esperanza»
La Fundación es una entidad de carácter benéfico-asistencial de apoyo a la infancia, la mujer y su maternidad, que cuenta con una experiencia ya de más de 14 años. La Fundación Madrina trabaja decididamente en la asistencia socio-sanitaria formativa y residencial de niños de 0 a 3 años y de sus madres. Son familias necesitadas y jóvenes madres adolescentes, en máxima pobreza y dificultad social y laboral. Realiza su acción social y sanitaria, a través de su «Programa Madre» mediante una intervención integral, con personal especializado y de apoyo-acompañamiento por voluntarios y voluntarias, así como madrinas y padrinos.
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