Enfermedades
Lepra: el bacilo que venció al tiempo
Los pesares de los leprosos están recogidos en la Biblia y en otros textos ancestrales. Nunca fue una enfermedad más. Con el correr de los siglos su incidencia ha frenado, pero el estigma permanece.
Los pesares de los leprosos están recogidos en la Biblia y en otros textos ancestrales. Nunca fue una enfermedad más. Con el correr de los siglos su incidencia ha frenado, pero el estigma permanece.
Cuando hablamos de la lepra pensamos en una enfermedad doblegada por la historia y los progresos científicos hasta erradicarla. De un bacilo pretérito que ya se encargaba de destrozar vidas hace milenios. Se han hallado evidencias en un esqueleto de 4.000 años de antigüedad. Nunca fue una patología más, pues la infección progresiva que afectaba principalmente a la piel, a los nervios periféricos y a la mucosa de las vías respiratorias y los ojos hacía estragos en el físico del paciente con afectaciones degenerativas muy graves e incapacitantes hasta transformarse en motivo de estigma, discriminación y pobreza.
El imaginario colectivo ha convertido la lepra en una suerte de aberración medieval. Y, sin embargo, el pasado es presente. La lepra es en la actualidad una enfermedad olvidada, pero es todavía una realidad en varias regiones del mundo. Aunque es cierto que la eliminación de esta patología como problema de salud pública se logró en todo el mundo en 2000, el Mycobacterium leprae afectaba a 173.358 personas a finales de 2016. Afortunadamente, hoy tiene cura con un cóctel con múltiples medicamentos (TMM). En los últimos 20 años se han tratado con TMM más de 16 millones de personas infectadas. En todo caso, es un mal y retorcido enemigo, una bacteria con la capacidad de sobreponerse al transcurrir de los milenios y a la ciencia es un adversario contra el que no se pueden bajar los brazos.
Un reciente informe de la Organización Mundial de la Salud apunta que los casos han aumentado por primera vez en los últimos cuatro años, especialmente en el Mediterráneo Oriental, Pacífico Occidental y Sudeste Asiático. India es el país con mayor número de detecciones, con un 82,6%, seguida de Brasil, con el 63%, e Indonesia, con el 11,7%. Ni siquiera España, como el resto de países desarrollados, puede considerarse inmunizada. En 2017 se identificaron ocho nuevos casos. Hablamos de 143 países afectados en mayor o menor medida. Los progresos incuestionables contra una enfermedad curable están condicionados por «la mancha» social que aún se cierne sobre los pacientes y que se convierte en un gran obstáculo para llegar a un diagnóstico y al tratamiento.
La OMS mantiene en el presente una Estrategia mundial con el propósito de acelerar actuaciones hacia un mundo sin lepra con la convicción de que se combate contra un bacilo prehistórico y una discriminación y un estigma contemporáneos.
✕
Accede a tu cuenta para comentar